El soterramiento, un argumento electoral pero «no una preocupación» ciudadana

Según Óscar Puente, ni siquiera es una de las preocupaciones principales de los vallisoletanos. No lo era en 2019, cuando se llegó a la cita con las urnas con el soterramiento descartado y la integración en marcha y los estudios propios le decían a los socialistas que no figuraba entre las cuestiones principales. Tampoco, asegura el alcalde, destaca entre los problemas que observan los ciudadanos. «La realidad es la que es, pero las percepciones no tienen nada que ver con la realidad. La realidad de lo que piensan los vallisoletanos es medible. Ahora se pregunta mucho por las encuestas, pero no por las diez quince primeras preocupaciones de los vallisoletanos. Los estudios cualitativos son muy importantes. El soterramiento no está entre las diez primeras preocupaciones, ni siquiera entre los ciudadanos que viven al otro lado de la vía», señaló Puente durante la presentación de Martín Fernández Antolín como miembro de su candidatura.

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«¿Todos hubiéramos querido soterramiento? Yo el primero. Pero mientras yo estaba en el notario -en el famoso vídeo en el que se comprometía a soterrar- había uno [Javier León de la Riva] que estaba contrayendo una deuda de 400 millones de euros. Cuando llegamos a la Alcaldía y destapamos el pastel, el soterramiento ya estaba muerto», añadió Puente.

Frente a esta postura, los aspirantes a desbancar al actual equipo de Gobierno insisten en recuperar la idea del soterramiento. Jesús Julio Carnero (PP) ha hablado de que hace falta «liderazgo» para ello y es consciente de que significaría renunciar al convenio firmado con Adif y Renfe en 2017, lo que inevitablemente conllevaría una negociación complicada. También hace falta una complicidad con el Gobierno de España, que no se dio tampoco en la época en la que los populares gobernaban con Mariano Rajoy y con Íñigo de la Serna, ex alcalde de Santander, en el Ministerio de Fomento.

Al otro lado de las vías, insisten Carnero y la Plataforma, viven 90.000 vallisoletanos que se ven afectados por el trazado ferroviario. Un nicho de votantes en un sector de la ciudad que en 2019 apoyó mayoritariamente al PSOE, con zonas en las que Óscar Puente superó con amplitud el 40% de votos. Si Puente quiere ganar las elecciones debe afianzar esa zona y pescar en feudos como Parquesol, Covaresa o Villa del Prado. El PP, mientras tanto, tiene que apuntalar el centro, conquistar esos barrios que fueron naranjas en 2019 y rascar votos en los barrios anejos a las vías.

Puente confía en que la apertura del paso de Panaderos y el nuevo paso peatonal en esa zona, que ya se atisba pero al que aún le queda tajo, servirá para que los ciudadanos contemplen mejor la idea de la integración. La oposición, mientras, insiste en calificar el plan como «de túneles y pasarelas» y considera que hará que muchos vecinos vuelvan a exigir el soterramiento como único modo válido de solucionar la cicatriz del tren.