Puente exhibe un informe de Adif para descartar el soterramiento y Carnero pedirá otro estudio

El Consejo de Administración de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad incluyó esta vez a Óscar Puente, que acudía como ministro de Transportes, y a Montse Rallo, directora de proyectos de Adif desde el año 2000. Ella ha coordinado dos informes junto a «diez ingenieros de caminos que son los mayores expertos de España en túneles, y España es una potencia mundial», defendió. Y acompañados por otra decena de arquitectos. Un primer informe sobre la integración ferroviaria que está en marcha. Y otro, sobre un hipotético soterramiento.

La conclusión que extrae Óscar Puente de los números y de las dificultades técnicas de la operación es que el soterramiento es inviable. «Solo hay dos alternativas viables, integración o disolución de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad. La tercera no existe: el soterramiento es una entelequia, un ejercicio de voluntarismo irrealizable», señaló. Supondría comenzar de cero una operación de en torno a 19 años «con un calendario optimista» y un coste de 1.570 millones solo en la obra de soterramiento. A cambio, propone la integración, «ya en marcha», con visos de ser una realidad en 5-6 años según Adif «y en todo caso en menos de una década», matizó Puente. Y con la ventaja añadida de permitir el crecimiento de Valladolid como nudo ferroviario en un futuro.

En el otro lado, Jesús Julio Carnero se encontró arropado por Juan Carlos Suárez-Quiñones, consejero de Medio Ambiente. Ayuntamiento y Junta de Castilla y León suman el otro 50% del accionariado de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad, aunque en caso de discusión el voto de calidad es para el secretario de Estado, en este caso José Antonio Santano, mano derecha de Óscar Puente. «Hemos abierto un periodo de reflexión sobre este estudio. Ayuntamiento y Junta no quieren la disolución de la Sociedad, lo que queremos es tener un cauce para avanzar en soluciones de integración que no sean incompatibles con el soterramiento», concluyó el alcalde de Valladolid. Ambos avanzaron que pedirán que la Sociedad Valladolid Alta Velocidad encargue un nuevo estudio sobre la viabilidad del soterramiento. «Necesitamos una segunda opinión», dijo Carnero.

Puente enfatizó que el estudio de Adif está hecho por técnicos que han trabajado de manera independiente. Y Montse Rallo abundó en que cada vez que se han presentado problemas con el proyecto de soterramiento que, en condiciones normales, hubieran hecho descartarlo, se les ha instado a superarlos a cualquier coste, con objeto de elaborar la propuesta de soterramiento más ajustada a la realidad posible, fuera cual fuera la cantidad o el plazo o el modo de construcción resultante.

Sin embargo, Jesús Julio Carnero considera que el de Adif «es un informe de parte». Conclusión que extrae de las palabras de Rallo en el Consejo de Administración, antes de su presentación ante la prensa, cuando ha defendido como más idóneas otras opciones como la integración ferroviaria. «Se nos presenta un estudio de parte, porque Adif no cree en el soterramiento. Y como no cree, llega a explicitarse que no cree tampoco en los que se están acometiendo actualmente», aseguró Carnero. Así, el alcalde ha pedido que «en los presupuestos para 2024, que siguen sin aprobarse, se contemple una partida clara para solicitar la elaboración de un estudio independiente, una segunda opinión. Es algo fundamental y esencial».

Liquidar la Sociedad a petición del Ayuntamiento podría suponer que el Consistorio tuviera que hacer frente a su parte de la deuda asumida en su día más los intereses devengados, más de cien millones de euros, además de las indemnizaciones que pudieran pedir los demás socios. Ante esto, Puente aseguró que si es la opción elegida por Jesús Julio Carnero «se intentaría que fuera lo menos gravosa para todos». «Que no se preocupe. Intentaríamos que fuera la menos gravosa posible, hay distintas opciones. No pretendo que sigan vinculados a un proyecto que no desean. Pero no voy a recibir una carta todos los lunes», señaló en referencia a las diferentes solicitudes que le ha enviado a este respecto su sucesor en la Alcaldía. «Espero una decisión lo antes posible de quien tiene que tomarla con madurez. Y despejemos ya las incógnitas», quiso zanjar.

Lejos de rematar la cuestión con una respuesta inmediata, Suárez-Quiñones y Carnero pidieron tiempo para estudiar el informe, reflexionar y solicitar un nuevo estudio. «Analizaremos el estudio que ha presentado. Y analizado, tomaremos las decisiones que estimemos oportunas», indicó el consejero. «Lo que se nos pone sobre la mesa es 'o lo aceptas o disolvemos'. No quiero ni una cosa ni la otra. Queremos estar en el diálogo. Analizaremos ese estudio, pediremos un nuevo estudio por la Sociedad Valladolid Alta Velocidad y si no, valoraremos acometerlo nosotros».

Mientras todo eso sucede, la Junta de Castilla y León acaba de aportar las cantidades fijadas en el convenio para 2023 y el Ayuntamiento debe poner 11 millones de euros antes de concluir el mes de marzo. Las obras de integración siguen en marcha, al igual que la redacción del proyecto del paso de Arco de Ladrillo, ya que las licita la Sociedad Valladolid Alta Velocidad, y está previsto que a finales de año se concluya la variante Este y se pueda proceder a anular la vía de Ariza al paso por Argales, tramo en el que están previstos tres pasos que ya tienen el proyecto listo para poder contratar la obra.

• Temas
• Política
• Óscar Puente
• Jesús Julio Carnero
• Infraestructuras
• Integración ferroviaria