Valladolid se asoma a una ola de calor extremo con alertas de 42 grados

Si se cumple el aviso, Valladolid machacaría todas las marcas anteriores de calor. La temperatura más alta consignada de forma oficial en la capital es de 41,1 grados, el 15 de julio del año pasado, a las 16:20 horas. El techo para una jornada de agosto está en los 39,5 grados que se anotaron el 13 de agosto de 2021, a las 15:10 horas. Y en lo que llevamos de verano, el máximo está en los 37,2 grados del martes 18 de julio. Los tres datos podrían rebasarse si se alcanzan los picos de los que alerta la Aemet.

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El organismo oficial ha lanzado avisos naranjas por altas temperaturas para este martes y miércoles. La ola de calor que inundará la península a partir de este martes se prolongará durante toda la semana, con máximas por encima de los 35 grados y mínimas que no bajarán de los 17. Incluso el miércoles se anuncia una noche tropical, con valores que permanecerán por encima de los 20 grados. Y todo ello, con probabilidad cero de lluvia y sin avisos de tormentas.

Esta será la tercera ola de calor del verano. Hubo dos en julio, pero apenas se extendieron durante tres jornadas, por lo que ninguna de ellas fue tan sofocante como las del año pasado. Valladolid atravesó este mes julio como el octavo más caluroso del último medio siglo, pero el hecho de que no hubiera olas de calor tan prolongadas en el tiempo (y el recuerdo del infernal 2022) hace que la impresión no haya sido tan relevante respecto a un julio más caluroso y seco de lo habitual. Esta ola que ahora se avecina sí que será más asfixiante, ya que se extenderá al menos hasta el jueves, pero con una prórroga sofocante, de momento, hasta el domingo.

«La incertidumbre de la evolución atmosférica es alta, por lo que es difícil establecer con certeza el fin del episodio de ola de calor», aseguran desde la Aemet, donde añaden que «con la información disponible hoy, el jueves 10 será probablemente el último día».

El motivo de las temperaturas disparadas en este segunda semana de agosto es la entrada de una masa de aire continental africana, muy cálida y seca, que lamió ya este domingo las costas del sur.

Esta masa avanza a estas horas hacia el norte y ha hecho retroceder las corrientes de aire frío que han refrescado el ambiente del centro y norte peninsular (incluido Valladolid) durante las últimas jornadas. En la zona más septentrional continuará el viento del norte y eso hará que el calor no sea tan intenso en la cornisa Cantábrica, pero en Valladolid las rachas de viento serán del sur (el miércoles) e incluso apenas se notarán a partir del viernes.

Esta escalada de las temperaturas (junto a una baja humedad relativa) ha empujado a la Junta a declarar la alerta por «riesgo extremo» de incendios forestales en Castilla y León. Y a esto se suma que en el sur y el este de la comunidad se esperan rachas de entre 25 y 30 kilómetros por hora (que pueden llegar el miércoles a los 45 kilómetros por hora en el este de la región).

Ante este panorama, la Junta insiste en la prohibición de encender el fuego en el monte «en todo tipo de espacios abiertos, así como en zonas recreativas y de acampada, incluso en las zonas habilitadas para ello». También está vedado el uso de barbacoas en espacios abiertos, de material pirotécnico (se suspenden las autorizaciones para el lanzamiento de cohetes) y de maquinaria cuyo funcionamiento habitual genere fuego, deflagración, chispas o descargas eléctricas.

Y aquí se incluyen sopletes, soldadores o radiales, que no se podrán usar en el monte y la franja de 400 metros que lo circunda. Estas medidas extraordinarias ya están en vigor y permanecerán en activo, al menos, hasta las 23:59 horas del día 9.

Además, las autoridades sanitarias han lanzado los habituales avisos de precauciones frente al calor: hidratarse, evitar el ejercicio en las horas centrales del día… El Plan Nacional de Actuaciones Preventivas ante los excesos de calor establece para Valladolid un umbral de 36 grados a partir de los cuales hay que estar muy atentos ante posibles impactos relevantes en la salud.

Y esto es clave esa semana ya que esos 36 grados se superarán holgadamente durante tres jornadas (martes, miércoles y jueves), con la posibilidad de que también se alcancen durante el viernes y sábado. De momento, las máximas para esos días están en 35 grados. Esta alerta es importante ya que, de acuerdo con el Instituto de Salud Global, con sede en Barcelona, el año pasado Valladolid registró 167 muertes atribuibles al exceso de calor. No fueron fallecimientos directos por golpes de calor, sino decesos en los que las altas temperaturas influyeron de forma decisiva para agravar patologías previas (más del 83% de las registradas en toda España fueron entre mayores de 80 años).

«Las personas mayores tienen reducida la sensación de calor y, por lo tanto, la capacidad de protegerse», aseguran desde el Ministerio de Sanidad. El Instituto de Salud Carlos III ha asegurado (en un cálculo que toma como referencia la serie temporal 2000-2009) que el riesgo de mortalidad atribuible a las altas temperaturas crece (con una probabilidad del 95%) «entre el 9,1% y el 10,7% por cada grado que la temperatura ambiente asciende por encima del umbral de impacto». En Valladolid, este exceso puede ser de hasta seis grados el miércoles. Y esto se asocia además a periodos de tres o más días consecutivos de temperaturas altas y no habituales (que es lo que aventura esta ola de calor que se avecina).