El SOS del Banco de Alimentos: la solidaridad con la DANA merma las ayudas a familias de Valladolid

La solidaridad con la DANA y las acciones solidarias desplegadas con los damnificados por las riadas en Valencia han dejado exhausta la capacidad de colaboración de los vallisoletanos, que se han encontrado, en un corto periodo de tiempo, con varias iniciativas para aportar dinero o víveres para los más necesitados. Y, a veces, no se puede llegar a todo.

Es la lectura que ofrecen desde el Banco de Alimentos. Reconocen que la urgencia con Valencia ha opacado las necesidades cotidianas que viven muchos hogares de Valladolid. Esta entidad atiende en la provincia (a través de 120 asociaciones, parroquias y oenegés) a 11.674 personas que precisan de ayuda para llenar la nevera. «Sus problemas siguen ahí y necesitamos apoyo económico para atenderlos», indica Mediavilla.

El año pasado, esta gran recogida invernal recaudó 236.860 euros en Valladolid, a partir de las aportaciones en caja efectuadas por los clientes de las principales cadenas de supermercados. Durante la presentación de la campaña de este año, el 19 de noviembre, Mediavilla reconoció que en esta ocasión sería muy complicado alcanzar esa cifra, debido a las campañas desplegadas durante esos días para atender a los afectados por la DANA en Valencia. Las perspectivas más halagüeñas hablaban de 200.000 euros. La realidad (aunque todavía faltan los datos concretos de algunas cadenas) es que la cuestación se ha quedado en 175.000 euros. Por eso, desde el Banco de Alimentos animan a los vallisoletanos a colaborar a través de las aportaciones 'on line'. A través de esta vía, el año pasado se consiguieron 131.546.

«El mes de diciembre es tradicionalmente bueno para este tipo de donaciones, que además permiten hacerse importantes desgravaciones fiscales», recuerda Mediavilla. Así, por ejemplo, en las donaciones de hasta 250 euros, es posible deducirse hasta el 80%.

«Si al final de mes consiguiéramos, en total, 300.000 euros (incluidos aquí los conseguidos en los supermercados), nos quedaríamos satisfechos», indican desde el Banco de Alimentos, para recordar que esta cantidad les serviría para alcanzar sin problemas hasta primavera. Y más en estos momentos, cuando estas entidades han dejado de recibir las aportaciones de fondos europeos, que se destinan ahora a atender a familias con hijos a través de las tarjetas monedero.

«Las necesidades siguen ahí», aseguran desde una ONG que el año pasado repartió 1.719.127 kilos de comida en Valladolid. Desde la pandemia, el Banco de Alimentos ha dado prioridad a las captaciones económicas frente a las operaciones kilos. Esto les permite controlar mejor los víveres de los que disponen en sus almacenes, ya que compran los diferentes productos en función de las necesidades que tengan en cada momento en la entidad. En 2023, distribuyeron 29.280 kilos de arroz, 22.095 de garbanzos, 17.100 de pasta o 21.606 de conservas vegetales.

Durante el último mes, además, han comenzado el reparto de la leche que los vallisoletanos donaron para los afectados por la DANA y que, por las dificultades logísticas para llevarlas a Valencia, han encontrado una vía para evitar su despilfarro a través del Banco de Alimentos. Esta entidad reparte entre las familias necesitadas de Valladolid la leche que esté a punto de caducar y, a cambio, se ha comprometido a entregar a Fesbal (la Federación de Bancos de Alimentos) una cantidad económica equivalente de 0,85 euros por litro de leche. La federación estatal transferirá después ese dinero al Banco de Alimentos de Valencia, que comprará los productos que vea más necesarios en cada momento concreto.

Este cambio de leche por euros obliga también a la ONG vallisoletana a disponer de fondos económicos para hacer frente a este desembolso extra. De ahí ese SOS lanzado para incentivar durante este mes de diciembre las aportaciones de particulares y empresa. Una vía para colaborar es a través de la web bancodealimentosdevalladolid.es, que incluye una plataforma para efectuar aportaciones a partir de diez euros.