Valladolid

La Policía Local suspende la vigilancia permanente del foco okupa de Delicias

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J. Asua

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«La ciudad es muy grande y no podemos tener ahí a la Policía constantemente; las patrullas van a pasar de forma habitual para controlarlo, no me voy a olvidar de ellos», señala el edil en referencia tanto a los inquilinos ilegales que se han hecho fuertes en dos pisos de esta finca como a los vecinos del entorno, que han expresado su miedo por la presencia de estos residentes ilegales.

Cuadrado aclara que la cuostodia continua de la construcción se ha llevado a cabo para dotar de seguridad a la zona e impedir nuevas entradas durante el fin de semana, pero considera que no se puede mantener en el tiempo. Precisamente, la presencia de una patrulla ha servido para controlar que solo entren y salgan las cinco personas identificadas el sábado por la mañana y que están residiendo en dos de las viviendas. Estos okupas han podido abandonar el inmueble y regresar a él ofreciendo sus datos a los agentes, que han impedido otros accesos ajenos a la lista con la que contaban.

La retirada de la patrulla fija en Olmedo 4 deja a los residentes en una situación compleja. «Sin vigilancia esto va a ser un coladero, en las intervenciones de la Policía que se han hecho desde el 15 de mayo han sacado a decenas de personas; antes de llamarles llegamos a contar hasta veinte dentro y esa casa está que se cae», recalcan.

A esto se suma la falta de respuesta de los okupas, que han hecho caso omiso a las visitas que han realizado esta mañana dos asistentes sociales del Ayuntamiento para ofrecerles alguna alternativa -albergue, piso provisional o prestación- con el objetivo de que abandonen el edificio sobre el que pesa una orden de derribo desde marzo de 2023.

Los afectados se están planteando unir a las comunidades de propietarios de la zona para hacer una protesta en la calle y exigir que se tomen medidas definitivas para poner fin a una situación de peligro urbanístico e inseguridad que arrastran desde hace muchos años.