Valladolid

La Junta controla ya cada 15 días a Findus mientras el mal olor continúa en La Farola

La denuncia pública que las asociaciones de la zona sur realizaron el pasado 22 de enero ha puesto en el foco informativo un problema que se arrastra desde hace años y ha activado, «por fin», a la Junta de Castilla y León, competente en la materia. Está bien que la Administración se ponga las pilas de una vez, aseguran, pero ya no se fían. «No queremos que nos den largas», advierten, al tiempo que recalcan que nadie en esta zona de la ciudad busca la clausura de la planta, ubicada entre el polígono de Argales y el parque de Las Norias. «Simplemente que hagan las cosas bien», insisten.

Y en ello están ahora los técnicos del Gobierno regional. Según la información facilitada por la Consejería de Medio Ambiente este pasado viernes, tras la modificación de la autorización ambiental aprobada en febrero, en la que se incluyen una serie de obligaciones técnicas para atajar las desagradables emisiones en los procesos de fabricación, el Servicio Territorial está realizando controles cada 15 días a la empresa para comprobar el cumplimiento de esos requerimientos.

El pasado 1 de marzo se revisaron los flujos de aguas residuales, los focos de emisiones a la atmósfera y el estado de la implementación de medidas referente al Plan de Gestión de Olores. El día 18 también se ha solicitado la acreditación de la empresa que va a realizar el Plan de Gestión de Olores y las mediciones que se deben incluir dentro de ese informe. Además, la consejería ha convocado a los responsables de medio ambiente y calidad de la firma de alimentación para una reunión el día 2 de abril, «a la cual asistirá una persona experta en olores que asesora a la empresa».

Tras las inspecciones e informes realizados hasta la fecha, desde la Dirección de Calidad Ambiental del departamento que gestiona Juan Carlos Suárez-Quiñones señalan que «de acuerdo con lo que conocemos antes y después de emitir la orden, la empresa está adoptando todas las medidas a su alcance y, entendemos, que deben ser efectivas en un plazo breve». En Findus corroboran este extremo. «No ha habido incidencias con los olores» en las últimas semanas, aseguran, y ya se están adaptando las instalaciones a lo ordenado por la Junta, aunque esas medidas requieren de un tiempo para que den los resultados esperados, según matizan.

Los residentes de La Farola quieren tener información de primera mano y para ello han enviado dos cartas a la Junta con copia a Findus –todavía si respuesta– con la intención de visitar las instalaciones y que sus responsables les expliquen hasta dónde se llega en las soluciones aplicadas. «Pensamos que la participación de las personas que venimos sufriendo este problema desde hace años es la mejor garantía para la inmediata solución del mismo. Creemos que este delicado asunto no admite dilaciones y queremos conocer sus opiniones ante esta petición razonable. La antigüedad del problema exige soluciones inmediatas y la colaboración participativa de los afectados y sus representantes», sostienen.

En principio, la Junta no se cierra a esa posibilidad. «No hay problema en realizarla, pero creemos que antes se debería tener una reunión para ver el objetivo que se pretende y programarlo adecuadamente. A este fin se convocará próximamente a la asociación de vecinos desde el Servicio Territorial de Medio Ambiente», avanzan. Así las cosas, el vecindario atisba aún con desconfianza el fin del calvario, pero subrayan que esta vez no van a aflojar hasta ver que su reclamación es atendida. «Son ya muchos años soportando esto», lamentan.