
Valladolid
El Ayuntamiento, con votos de PP y Vox, pide a Adif que no siga con la estación «que impide el soterramiento»Secciones
Servicios
Destacamos
Valladolid
El Ayuntamiento, con votos de PP y Vox, pide a Adif que no siga con la estación «que impide el soterramiento»El Ayuntamiento de Valladolid pedirá al Ministerio de Transportes que la estación, que es incompatible con el soterramiento porque se ha pensado para que se ... construya en superficie, según el convenio vigente, sea compatible. Y para ello solicita a Adif «que no lleve a cabo ninguna actuación de las que tiene previstas para la construcción de la remodelación de la estación de viajeros que condición o impide la aplicación de otras opciones diferentes», es decir, el soterramiento. Traducido a lenguaje menos burocrático: que se pare todo para replantear la estación. Lo que supondría reiniciar el proceso, que ha llevado seis años de redacción del proyecto constructivo. Solo que esta vez habría que incorporar un paso previo, como explicaba la directora general de Planificación de Adif, Montse Rallo, a El Norte: partir de un proyecto de soterramiento y que el proyecto de la estación se convirtiera en una suerte de primera fase de ese proyecto.
Valladolid es Punxsutawney. El 11 de marzo de 2024 se celebró un Pleno sobre el soterramiento. El 10 de marzo de 2025 se ha celebrado un Pleno sobre la compatibilidad del soterramiento con la estación. Habrá más, es seguro. Si la localidad de Pensilvania tiene una marmota que sale cada año para aventurar cuánto queda de invierno, en el Ayuntamiento de Valladolid el debate vuelve a girar sobre los mismos argumentos. A un lado, el deseo de una operación prometida desde hace 27 años, si al portavoz de la CEOE que intervino en la sesión no le fallan las cuentas. Al otro, un convenio de integración firmado por PP (Junta y Ministerio) y PSOE-VTLP (Ayuntamiento), una estación en marcha, un paso subterráneo casi en fase de licitación y el resto en espera.
Noticias relacionadas
A Víctor Martín (Vox) le sirvió la defensa del soterramiento para incrustar en el discurso críticas a Pedro Sánchez -porque apostaría antes por soterrar en Marruecos que en Valladolid- y a Yolanda Díaz -que si se molesta por un «guapa» en el Congreso se vería «acongojada» por pasar por un «túnel del miedo» y recibir un «guapa» o algo más «de un grupo de desconocidos»-.
El debate serio corrió a cargo de Alberto Gutiérrez Alberca (PP), que ya era concejal cuando comenzó todo y conoce de primera mano el paño, y Pedro Herrero (PSOE), portavoz socialista que estaba ya en el equipo de Gobierno cuando llegó 2017 y Ayuntamiento, Junta y Ministerio rubricaron el actual convenio de integración ferroviaria. A ellos se sumó Rocío Anguita con un argumento socioeconómico: la situación del este de la ciudad no se debe a las vías sino a la falta histórica de inversiones. Gutiérrez defendió que el soterramiento está «más cerca que nunca». Y esgrimió que Valladolid ha sido «generosa» en la expansión ferroviaria que empezó con el despliegue de la alta velocidad. «Valladolid permitió que la alta velocidad llegara en superficie. Podía haberse negado. Pero fue generoso con otros territorios, para que pudiera llegar a Asturias, León, Cantabria, Y vasca. Y eso ahora nos perjudica. Eso no nos puede perjudicar, debe ser un componente en la mesa. Estamos más cerca del soterramiento que nunca, porque no se podía realizar si no existía una variante de mercancías. En abril entra en funcionamiento. Y pretendemos sustituirlos por trenes de viajeros», señaló.
Pedro Herrero, portavoz socialista, replicó directamente al alcalde, Jesús Julio Carnero, como es habitual. Apuntó a que la última tasación de los suelos liberados en Farnesio es de 285 millones de euros, ante el abucheo de los miembros de la plataforma del Soterramiento presentes en la balconada del público. Coincidió con Vox en un aspecto: «Los soterramientos no se van a hacer más en España», dijo Herrero. Y poco antes Víctor Martín había dicho: «Soterrar nunca será la prioridad de ningún ministerio de fomento independientemente del color que sea». El concejal de Vox llegó a considerar que con los pasajeros previstos por Adif a futuro bastaría con reformar ligeramente algún edificio anexo o utilizar espacios vacíos en el actual. Algo que obvia que las vías se van a duplicar, por ejemplo, al margen de otros condicionantes.
Gutiérrez Alberca basó su defensa en lo sucedido en las últimas dos décadas y media y en la concatenación de hechos que han desembocado en la situación actual. Y lo hizo para argumentar la necesidad de que el Ministerio (Adif y Renfe) escuchen al Ayuntamiento y a la Junta, que camina de la mano del actual alcalde, Jesús Julio Carnero, como en 2017 caminó al lado de Óscar Puente. «En 2002 y en 2017 se tuvo en cuenta la posición del alcalde de la ciudad. Hemos conseguido una cosa, que la Junta apoye la reivindicación del Ayuntamiento en la sociedad Valladolid Alta Velocidad. El 50% del consejo de administración defiende una cosa y el otro 50%, otra. A la ciudad no se le puede decir o todo o nada. Somos el 50%. ¿Cómo se nos plantea ese chantaje? No vamos a transigir», anunció.
Y Pedro Herrero acusó al alcalde de «ni hacer ni dejar hacer». «Adif, voluntariamente, estudió el caso del soterramiento a nivel de anteproyecto y le dieron el trabajo hecho. Entonces usted cargó contra el equipo de expertos, cuestionó la profesionalidad de los funcionarios, pidió sus currículos, anunció otro estudio profundo y riguroso... Que consistió en un trabajo rápido mediante contrato menor a una empresa de su confianza en Madrid. Y su empresa de confianza devolvió la situación a los muros pantalla que ya fueron desestimados por los técnicos hace veinte años».
En esta continua mirada al pasado que son los plenos sobre el soterramiento y la integración, Rocío Anguita (VTLP) recordó que «desde el Gobierno de Mariano Rajoy en 2012, y fruto de la gran recesión económica, se aprobó el plan de infraestructura y viviendas, 2012-2024, con Ana Pastor al frente. Se recogía que el AVE contaría con una inversión multimillonaria» para construir infraestructuras como la Y vasca, el enlace con Asturias, la llegada de la alta velocidad a Galicia... «Esto no va de qué partido está en el Gobierno, sino de poner a España en el mapa ferroviario de Europa. Son planes que se realizan a largo plazo, no dependen del Gobierno de turno. Ningún Gobierno va a considerar esperar otros 15 años y que haya un enorme cuello de botella en Valladolid», insistió Anguita.
El Ayuntamiento, de momento, «insta al Ministerio», según el texto aprobado por 14 votos de PP y Vox contra 13 de PSOE y Toma la Palabra, a abrir «un diálogo […] orientado a buscar y acordar una solución constructiva de la estación que compatibilice los intereses de Adif y del Ayuntamiento». Y añade: «Evitando, en todo caso, la ejecución de una opción que impida o dificulte el soterramiento de la red arterial ferroviaria». Una ejecución, la de la obra de la estación, que comenzaría en octubre si se cumplen los plazos previstos en la licitación.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.