Valladolid remozará sus cementerios con mejoras en caminos y tanatorios

Es una de las veteranas en El Carmen, eslabón de una cadena de cuatro generaciones (empezó la bisabuela Cesárea y ahora sigue Joana) de floristas a las puertas del camposanto.

«Este año se ha vendido menos», reconoce. Las precipitaciones de los últimos días han aguado las previsiones. «Y el problema de las flores es que no se pueden guardar». Porque se agostan y pierden, como la vida misma.

Cuentan que los crisantemos están de capa caída (son más aburridos «y manchan las tumbas») y que ahora se apuesta por otras flores. Como el clavel. «Y a mí me gusta mucho la rosa», dice Lidia Alonso, al frente de otro de los grandes puestos floristas del cementerio. Desde primera hora de la mañana prepara centros y ramos que los familiares depositarán en las lápidas de sus seres queridos. Son flores que han llegado de Holanda, de Colombia, de Ecuador.

«El transporte se ha encarecido muchísimo, pero no hemos subido precios», cuenta Lidia, en una mañana que amaneció con lluvias débiles que muy pronto se marcharon, dejando tras de sí un rastro de charcos y caminos mojados; en algunos tramos, embarrados. Aunque el próximo año esto puede en parte cambiar.

El alcalde, Jesús Julio Carnero, anunció que el Ayuntamiento habilitará a lo largo de 2024 una partida para adoquinar varios senderos del camposanto que aún no están pavimentados. «Vamos a hacer una análisis de estas calles y preparar un proyecto al respecto», añadió Alejandro García Pellitero, concejal de Medio Ambiente. La gestión de los cementerios municipales contempla además un obra en Las Contiendas, con 1,5 millones de inversión, doce meses de ejecución y la intención de que las obras puedan comenzar en el primer trimestre de 2024.

La intención es ampliar de seis a ocho las salas de velatorio, con una reforma de la cafetería («para que pueda ofrecer servicio de comidas») y un lago en el que los familiares puedan depositar las cenizas de sus fallecidos (estará cerca del tanatorio, debajo de la zona 2 de Las Contiendas).

El alcalde hizo estos anuncios antes de que la comitiva municipal, con representantes de todos los partidos, recorrieran varias tumbas significativas del cementerio, como el panteón de vallisoletanos ilustres (allí están enterrados Miguel Delibes, José Zorrilla, Rosa Chacel...) o la sepultura del policía Daniel Prieto, asesinado en acto de servicio en 1987.

También hubo una ofrenda floral en el memorial de los represaliados del franquismo y víctimas de la Guerra Civil. Allí se descolgó Irene Carvajal, concejal de Vox y teniente de alcalde, que atendía el teléfono mientras el alcalde y los portavoces de PP, PSOE y Toma la Palabra depositaban juntos un ramo de flores comprado por Pedro Herrero (PSOE)a las puertas del Carmen.

El arzobispo, Luis Argüello, recordó que ese lugar del cementerio «hace experimentar a fondo un deseo de reconciliación y convivencia». «Es importante hacer una llamada de atención, frente a la polarización que vive el mundo en el que estamos y desde el respeto a las creencias. Debemos construir un futuro, desde perspectivas diferentes, de reconciliación, con dignidad para toda vida y deseo de bien», apuntó Argüello, quien antes, ensalzó el papel de la belleza como vía de trascendencia, con el recuerdo a esas personas destacadas del panteón de ilustres, pero también de «todos aquellos ilustres desconocidos» que ocupan los cementerios, ese «dormitorio del que todos esperamos despertar en una vida plena» y que es espacio «en el que nos hacemos preguntas sobre la vida y la muerte, aunque cada uno lo haga desde su forma de vivir y de pensar».