El plazo límite para pagar la mitad en una multa de tráfico

Recibir una multa no es plato de buen gusto. Y eso depende del importe y de la cantidad de puntos que pueda restar la infracción. Lo mejor es conducir con precaución y así evitar sufrir una sanción por nuestra conducta al volante. Es entonces cuando se abre un periodo de tiempo donde el importe de la multa es la mitad. Es decir, podemos pagar un 50% del coste total de nuestra infracción.

En concreto, se trata de 20 días naturales desde el día siguiente a al notificación de la multa. Es durante este periodo que el importe de la sanción queda reducido a la mitad. La DGT recuerda que si un conductor decide abonar la sanción en estos primeros 20 días, está renunciando a su derecho a presentar cualquier tipo de alegación sobre la multa impuesta.

En caso de interponer una reclamación, estaría perdiendo la oportunidad de abonar la mitad de la cantidad y, si pierde el recurso, también está obligado a pagar la sanción en su totalidad. A todo esto hay una excepción, si la multa se ha impuesto por no haber identificado al conductor responsable de una infracción.

Si el plazo de 20 días naturales ha finalizado, comienza el periodo ordinario, que dura hasta 45 días después de recibir la notificación por parte de la DGT. Durante este tiempo, la oblgación es abonar el importe de la sanción en su totalidad y, en caso de no hacerlo, la Agencia Estatal de la Administración Tributaria quien tome la iniciativa y se haga cargo del proceso. Además, en este supuesto, se cobrará con un 20% de recargo.

El pago de una multa de tráfico puede realizarse a través de diversos métodos, de forma presencial u online. Con la primera posibilidad se puede hacer llamando al 060, en una oficina de correos, oficinas de Tráfico, directamente al agente que ha puesto la infracción, si fuera el caso, o el sucursales bancarias. De forma electrónica, tenemos la posibilidad a través del código QR que se encuentra en el boletín o de la aplicación mi DGT.

En todo caso, lo más sencillo es abonar la cantidad lo antes posible y aprovechar la rebaja, siempre que no se quiera presentar alguna alegación al respecto. En todo caso, procrastrinar puede llevar a que paguemos la multa completa.

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