Las tres patas que hacen viable el proyecto gimnástico

Aquel 5 de mayo, primero soleado y después tormentoso, en el que la Gimnástica Segoviana consiguió el ascenso a Primera Federación se produjo el aviso de Ramsés Gil sobre el mismo terreno de juego de La Albuera: «Ahora le toca arremangarse a la ciudad; si no, será inviable». El técnico azulgrana ponía el foco en la necesidad de dar un paso adelante para que el sueño de los gimnásticos en Primera Federación pueda ser viable. Porque con los mismos apoyos y condicionantes que en Segunda Federación, la Sego ni siquiera podría haber comenzado un viaje que tendría muchas opciones de tener una rápida vuelta a la cuarta categoría del fútbol español.

El paso hacia delante debe ser global. El propio club lo ha dado, con un refuerzo del cuerpo técnico para «hacer más fácil» la vida a los jugadores y tratar de optimizar los escasos recursos de los que dispone el club. Pero con eso no basta. Hacían falta otras tres grandes patas para sostener el proyecto.

La primera de todas ellas es la social. Los socios han respondido a la llamada del club con la mayor cifra de abonados que se recuerda en la historia. Casi 1.700 personas han adquirido su carné para poder acudir a La Albuera, una cifra ligeramente inferior a los 1.750 previstos por el club para cuadrar el presupuesto. Pero no se encienden las alarmas. Aún restan semanas y se espera que con el inicio de la competición y posibles atractivos como la Copa del Rey se pueda alcanzar o incluso superar esa cantidad. Pero ni siquiera en los mejores tiempos del extinto Caja Segovia se alcanzaban tantos abonados como ahora registra la Gimnástica Segoviana.

La respuesta de la masa social ha colocado a la entidad en la mitad alta de la clasificación de los clubes con más abonados de Primera Federación, aunque lejos de los socios que a estas alturas de temporada disfrutan clubes como el Recreativo de Huelva, el Real Murcia o el Hércules. En el grupo de los azulgranas son los equipos de Castilla y León los que cuentan con más abonados, con la Ponferradina, la Cultural Leonesa y Unionistas de Salamanca superando o quedándose a las puertas de los 5.000 abonados. El Amorebieta, primer rival de la Segoviana, cuenta con alrededor de 1.150 socios.

Pero la respuesta de la afición gimnástica no ha llegado solo en forma de abonos. También avalando la inscripción del equipo de Primera Federación con aportaciones voluntarias hasta alcanzar los casi 90.000 euros exigidos por la Real Federación Española de Fútbol para poder competir en la categoría, tras haber rebajado su exigencia de 200.000 euros a un 10% de los gastos auditados del presupuesto anterior. El gesto de la masa social ha ahorrado al club los miles de euros que debería haber afrontado en caso de acudir a una entidad bancaria para que avalase la inscripción del equipo.

Pero hay otras dos patas imprescindibles para sostener el nuevo proyecto de la Gimnástica Segoviana. Por un lado, el empresarial. En total, el club azulgrana cuenta con alrededor de un centenar de patrocinadores que, en mayor o menor medida, apoyan a la entidad gimnástica durante su viaje en Primera Federación. Una cifra impensable hace una década que se refleja en el estadio municipal de La Albuera, donde en las gradas ya apenas queda hueco para los carteles de los patrocinadores.

Entre todos ellos destaca CajaViva Caja Rural de Segovia, que se ha convertido en el principal patrocinador privado del club tomando el testigo de BioAmmo, empresa con problemas económicos que afectaron la campaña pasada a los azulgrana. También se han incorporado otros patrocinadores como Zibá José María Eventos y se mantienen otros como Drylock. La imagen de estas dos últimas empresas cubrirá en los próximos días los dos banquillos del municipal de La Albuera. En las próximas semanas el club también espera incorporar a nuevas empresas para alcanzar la partida prevista en el presupuesto.

La tercera y última pata es la institucional. En este apartado, la Gimnástica Segoviana ha conseguido el respaldo buscado en administraciones como el Ayuntamiento de Segovia o la Diputación Provincial. En el caso de la institución presidida por Miguel Ángel de Vicente, ya se ha materializado una subvención directa de 60.000 euros a la entidad azulgrana. Un incremento de casi el 1.300%, ya que la partida que destinaba la institución provincial hasta la temporada pasada ni siquiera llegaba a los 5.000 euros.

Las cuantías que aportará el Ayuntamiento de Segovia todavía no han trascendido, ya que previsiblemente saldrán de los presupuestos municipales de 2025 que todavía están en fase de redacción y que no se aprobarán –si consiguen el apoyo de algún grupo de la oposición– hasta finales de año o comienzos del siguiente. No obstante, en la junta directiva están satisfechos con la aportación comprometida por el que será el principal apoyo económico de la Gimnástica Segoviana. Además de aumentar la partida económica, en el club también valoran el apoyo municipal para acometer en los próximos meses mejoras en La Albuera como la renovación de la iluminación, la sustitución del césped cuando acabe la temporada o los primeros pasos para construir nuevas gradas en los fondos del estadio.

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