Fuentesaúco, primera zona de Segovia sin contagios en una semana, prefiere «salir de los últimos» del confinamiento

Y es que el amarillo va ganando terreno en la provincia de Segovia a los naranjas y rojos. Pero el objetivo es alcanzar un color verde, que ayer logró la zona básica de salud de Fuentesaùco de Fuentidueña que comprende a once municipios de la provincia (Adrados, Aldeasoña, Calabazas de Fuentidueña, Cozuelos de Fuendiueña, Fuentepiñel, Fuentesaúco de Fuendiueña, Hontalbilla, Membibre de la Hoz, Olombrada, Perosillo y Torrecilla del Pinar). Es la única de Segovia que ha conseguido que durante los últimos siete días no se hayan registrado en sus municipios pacientes con coronavirus (entre los que se incluyen aquellos con sospecha clínica de la enfermedad aunque no se les haya realizado la prueba). La siguiente zona de salud más próxima a registrar cero casos es la de Villacastín (comprende nueve municipios) con dos nuevos casos confirmados durante los últimos siete días.

El siguiente paso a conseguir para demostrar que se gana la batalla al virus es registrar cero casos durante los últimos catorce días. En Castilla y León todas las provincias, salvo Segovia y Soria, ya cuentan con alguna zona básica de salud sin nuevos casos confirmados durante las dos últimas semanas (en color verde) en un mapa en el que predomina el naranja (entre 0,7 y 1,4% de personas enfermas por número de tarjetas sanitarias en cada zona) en Segovia. La buena noticia es que el rojo (indice superior al 1,4% de casos) ya solo se mantiene en el la zona básica de salud de Sacramenia al reducir su incidencia el área del Real Sitio de San Ildefonso.

«La gente está siguiendo a rajatabla el confinamiento. En el pueblo no hemos tenido ninguna conducta irresponsable», celebra Marta Isabel Rodrigo, la alcaldesa de Fuentesaúco de Fuentidueña, uno de los municipios de la zona básica de salud sin casos registrados durante la última semana. «Al principio sí que tuvimos el caso de un matrimonio, pero en los últimos días no hemos tenido constancia de más», añade la regidora. Tampoco han experimentado un aumento de la población por la llegada de vecinos a sus segundas residencias y se intenta que «nadie salga o entre del pueblo» si no es por necesidad.

Sin embargo, la cada vez menor incidencia del coronavirus en su municipio –y en el resto de la zona básica de salud– no se traduce en una petición para salir antes del confinamiento. Todo lo contrario. «Casi prefiero que cuanto más tarde mejor. Y salir de los últimos para ver si de verdad es seguro», apunta la alcaldesa, que explica que en la zona la mayoría de los vecinos no tienen necesidad «urgente» de que acabe el confinamiento. «Además está el factor miedo o respeto, que creo que estará muy presente cuando acabe el confinamiento». comenta.

En Villacastín, próximos a conseguir una incidencia nula del coronavirus durante la última semana, también son reacios a ser pioneros en el confinamiento. «No me fío. Con esto nunca se sabe e igual puede significar un rebrote», afirma su alcalde, Julio César Sánchez. El alcalde afirma que la gente «está concienciada» y cumple con el confinamiento, aunque señala la llegada de vecinos a sus segundas residencias en las urbanizaciones cercanas.