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Juntos suman poco más de cinco mil habitantes, pero estos barrios (en los extremos norte y sur de la capital) presentan unas peculiaridades que condicionan algunas de las peticiones que plantean a los políticos de cara a las próximas elecciones del 28-M. Son los llamados barrios periféricos. Aquellos que se encuentran más alejados del corazón capitalino y que, en las últimas elecciones, votaron de forma mayoritaria al PP (en La Overuela y el Pinar de Antequera) o el PSOE (en Puente Duero).
Pinar de Antequera
«Somos un barrio peculiar, rodeado de naturaleza, y tenemos los mismos problemas (limpieza, seguridad) que en otras zonas. Pero, además, hay cuestiones específicas que nacen de nuestra singularidad», dice Sara San José, portavoz de la asociación vecinal del Pinar de Antequera, que resume algunos de los puntos negros que aprecian en el barrio. «Hay pinos que están muy poco cuidados, algunos abandonados. Son viejos y se están empezando a caer, con el peligro que eso conlleva. El año pasado, por ejemplo, se cayó un pino en la calle Acacias, un domingo sobre las 14.00 horas. Afortunadamente, no pasaba nadie por allí y no ocurrió nada. Pero hay que ocuparse un poco más de esto», cuenta Sara, quien se fija especialmente en el pino que hay junto a la parada del autobús. «Es un árbol emblemático para el barrio que necesita que lo apuntalen porque, además, está afectando a la pérgola que hay ahí, y que se está empezando a inclinar». Vinculado con los árboles, piden también un repaso a las aceras levantadas por las raíces. Y reclaman aceras para el tramo de la calle Estío, que no tiene. Además, entre sus reivindicaciones está el embellecimiento de la zona situada frente a la parada del autobús, en la calle Acacias. «Es uno de los puntos de acceso al pinar y una de las zonas más feas del barrio. Si pasas al bulevar, las calles ya son bonitas, pero en esa zona crecen hierbajos, no tiene bancos ni farolas, los árboles están desperdigados… Habría que hacer algo en esta zona y bautizarla como plaza de Francisco Pino, ya que está frente a la casa en la que vivió el poeta», propone Sara, quien reclama además un punto de alquiler de bicis, «como en el resto de barrios».
Puente Duero
También al sur está Puente Duero, un barrio que recuerda que todavía tiene en su entramado calles sin asfaltar. «La calle Viñedos está en tierra y, una vez que se ha hecho la cesión por parte de los vecinos, pedimos que, a estas alturas del siglo XXI, por fin se urbanice», cuenta Juan Carlos Prieto, presidente de la asociación vecinal. El colectivo recuerda que hay todavía inversiones pendientes que en su día («hace tres o cuatro años») recibieron el visto bueno de los presupuestos participativos. Está, por ejemplo, la sustitución de los columpios de la calle Real: «Presentan un muy mal estado, sobre todo la barandilla exterior, que tiene las maderas astilladas». También piden un parque infantil en la calle Puente de la Barqueta. Y están a la espera de que comiencen las obras, ya anunciadas, para la sustitución del pavimento en la Cañada de Valdestillas. «Estaba indecente y hemos logrado que este año la metan en el proyecto de inversiones», revela Prieto.
La Overuela
En el otro extremo de la ciudad, al norte, las preocupaciones de La Overuela miran hacia un tema que reivindican desde hace décadas: una mejora de los accesos al barrio. «El acceso desde el sur, desde la antigua N-620, es peligroso. Conseguimos que ampliaran el camino para las bicis, pero fue a costa de hacer más estrecha la fachada», cuenta Carmen Terán, portavoz, junto a Manuel Arias, de la asociación vecinal La Isla. «El puente es muy estrecho, tiene un talud peligroso, con un desnivel de casi quince metros, y no hemos conseguido aún que se ensanche», cuenta Arias, quien recuerda que en su día se intentó a través de un frustrado voladizo. Pero también reclaman mejoras en los accesos desde el norte, por la A-62, que se podrían ver afectados con el tercer carril anunciado para esa autovía entre Dueñas y Tordesillas.
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A esta preocupación histórica por los accesos se unen otras reivindicaciones, como una mejor conexión del barrio con el centro a través del transporte público. «La línea 24 pasa cada hora. Nos dicen que no hay demanda suficiente para mejorar la frecuencia, pero es que es tanto tiempo de espera que mucha gente prefiere ir en coche porque el servicio no es eficaz», cuenta Terán, quien sugiere que el trayecto de ida incorpore una parada cerca del centro de salud de La Victoria, del que depende. Otras medidas que proponen a los partidos son la ampliación del parque de las Lavanderas, una cubierta para la cancha de la calle Santa Cipriana y una revisión de los criterios de selección de los presupuestos participativos: «Los barrios con menos población siempre estamos en desventaja».
Los programas electorales
-Accesos a La Overuela con tres rotondas en la N-620
-Conexión peatonal y ciclista con Fuente Berrocal y La Galera
-Reforma de la instalación juvenil El Pinar en el antiguo Círculo Campestre.
-Ampliación de senderos saludables y accesibles en el Pinar de Antequera, para potenciar el pinasr como «bosque para la salud». Rehabilitación de la zona joven y mejora de Los Talleres del Pinar y del Círculo Campestre.
-Cierre del triángulo ciclista-peatonal entre el Pinar, Puente Duero y Simancas, donde falta por urbanizar la parte del Camino Viejo que discurre por el término de Valladolid.
-Impulso de la conexión peatonal y ciclista con Fuente Berrocal y la mejora de la ya existente en La Overuela, estudiando la posiblidad d edotar a esta última de una salida a la autovía. Creación de un espacio público para la celebración de actos comunitarios.
-Instalación de una estación del nuevo sistema de préstamo de bicicletas Biki en el Pinar de Antequera.
-Mejorar los accesos a La Overuela, tanto desde las esclusa 41 como en la carretera desde la VA-20, con un nuevo puente de acceso.
-Mejoras en el Centro Municipal de Participación de Puente Duero, tanto en equipamientos como en la programación de actividades y servicios
-Mejora de la conexión de estos barrios con otros barrios y con el centro de la ciudad (más líneas de autobús, más paradas dentro de los barrios y mayores frecuencias).
-Mejora de la iluminación del pinar de Antequera.
-Construir una acera y un carril bici seguro que conecte Fuente Berrocal con la cuesta de la Maruquesa.
- Parque canino en Fuente Berrocsl.
- Nuevos parques infantiles tiles en Fuebte Berrocal.
-Seguir mejorando las calles, aceras y servicios del barrio de Puente Duero
Puente Duero: Sustitución de los juegos infantiles de los parques, actualmente en mal estado y obsoletos. «Se aprobó hace tres años 60.000 euros en los presupuestos participativos, para la sustitución de los mismos y reparación de la valla de madera y aún sigue sin hacerse. Igualmente hace dos años se aprobaron otros 60.000 euros para la crea de un nuevo parque en calle La Barqueta, también si realizarse. Eliminación de presupuestos participativos, sustituyendo por reuniones con las asociaciones de vecinos , con los presupuestos participativos los barrios pequeños, nunca tienen opciones de conseguir nada Mayor limpieza de las calles del barrio. Reparación urgente de las vías de servicio de la cañada de Valdestillas».
Pinar de Antequera: Rehabilitación de las zonas deportivas descuidadas y abandonadas. Limpieza de calles. Combatir una ingente plaga de cucarachas.
Berrocal: «Carril bici y acera que conecte el sector con Valladolid».
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Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
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