Tarta de turrón con las sobras de navidades

En este caso, juega con el popular turrón blando y el duro para decorar. Los pasos son muy sencillos. En primer lugar, se prepara la base de la tarta con unas galletas y mantequilla. Se machan hasta hacer una tierra de galletas y para compactarlas se añade un poco de mantequilla derretida. Una vez hecha la mezcla se coloca con cuidado en el fondo del molde, que en este caso, estará cubierto con un papel de horno.

Poco a poco se aprieta y se reserva. Mientras, se enciende el fuego y en una cazuela se vierte la leche, se reserva un poco para añadir después, luego la nata y se va removiendo. A continuación, los trozos de turrón blando cortados lo más pequeño posible. Con la ayuda de unas varillas se da vueltas a la mezcla para evitar que el turrón acabe pegándose en la cazuela.

En el momento en el que rompa a hervir se retira del fuego y se añade el resto de leche fría que se había reservado. Se lleva de nuevo al fuego y se continúa removiendo hasta que de nuevo hierva. En ese momento se apaga el fuego y se deja atemperar.

El siguiente paso es verter la mezcla con cuidado en el molde, para ello, la gerente y cocinera del Hostal Restaurante Catalina de Austria (Torquemada) recomienda colocar un tenedor sobre la masa de galleta que haga la función de 'tobogán' con la mezcla. Con un cucharón se vierte con cuidado la mezcla sobre el tenedor sobre el que se deslizará hasta llegar a la galleta y cubrirse todo.

Para terminar de uniformar la masa se agita un poco el molde con cuidado y se lleva a la nevera. Allí se dejará enfriar al menos durante seis horas, así que se recomienda preparar este postre de un día para otro. Para finalizar, solo quedará la decoración. Se aprovecharán de nuevo los restos de turrones más duros que se pueden trocear y colocar en la parte superior.