La clásica lasaña boloñesa

Es una receta fácil de preparar y las opciones del relleno pueden ser tantas como se te ocurran, si bien es cierto que la boloñesa es con carne picada, también hay alternativas como de verduras, espinacas y champiñones o por ejemplo jamón y queso, entre otras.

En una sartén con un poco de aceite se pocha la cebolla picada y la zanahoria troceada. Luego se añaden también unos trocitos de panceta y antes de añadir la carne picada se salpimenta. A fuego medio se va friendo y se añade el vino blanco hasta que se elimine el alcohol. Cuando se haya reducido la carne y consumido el vino blanco será el momento de poner un poco de tomate frito e ir mezclándolo todo.

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Mientras en otra cazuela con agua caliente se echan las placas de pasta y se cocinan hasta que queden blanditas siguiendo las indicaciones del fabricante. Luego se escurren y se dejan en un paño de cocina. Mientras se cuecen las placas se puede ir preparando la bechamel en una sartén se añaden los 50g de mantequilla y en cuanto se funda se agrega la misma cantidad de harina. Se mezcla bien y se agrega la leche poco a poco sin dejar de remover con la ayuda de unas varillas para evitar los grumos. Cuando esté bien mezclada se añade la nuez moscada y un poco de pimienta.

Para montar la lasaña, se pinta la fuente con un poco de mantequilla para que no se peguen las láminas y se cubre la base con una primera capa. Luego se añade la carne y otra capa de placas. Cuando hayamos terminado, se cubre la última capa con bechamel y se espolvorea con queso parmesano rallado. En el horno, precalentado, estará un cuarto de hora a 200º.