Cómo hacer pan casero, por una agente de viajes confinada en casa

Es el caso de Noemí Llapart, que trabaja en una agencia de viajes en Aranda de Duero (Burgos) obligada a cerrar, y que en estos últimos doce días, ha apostado por amasar y fabricar su propio pan en casa, convirtiéndose en toda una experta. «Pensé que así, evitamos tener que salir de casa todos los días a por el pan, porque el resto de los productos ya los tenemos con una compra semanal, y así estamos encantados», explica.

De esta manera, tirando de una receta facilitada por sus hermanas, se puso manos a la obra y, en algunas ocasiones, incluso acompañada por sus hijos, Hugo y Lucas. El primer paso de la receta consiste en depositar el agua y el aceite en un bol y templar la mezcla en el microondas durante 10 segundos. Después se agrega la levadura de panadería, si es fresca se tendrá que desmenuzar. «Con una cuchara se remueve e integra todo. Después, se incorpora la mezcla a un recipiente de mayor tamaño para añadir harina, sal y, si se quiere, semillas o frutos secos», detalla Noemí.

A partir de ahí, se remueven los ingredientes hasta que se consigue la masa y, tras echar harina en la encimera de la cocina, con las manos se comienza a dar forma a la masa. «Si se pega, se echa más harina y si la masa está dura, se añade un poco de agua», precisa. Llega el momento del horneado y es necesario un molde de cristal con tapa. El molde se unta antes con aceite y al colocar la bola de masa, se hacen unos cortes tipo rejilla en la parte superior. Antes de meter al horno, se pinta la superficie con aceite y se espolvorea con harina.

El horno se mantiene a 220º y se deja entre 40 y 45 minutos. «Cuando veamos que está dorado, lo retiramos y lo dejamos enfriar sobre la rejilla. Y ya tenemos el resultado final», indica Noemí. El pan está listo para comer y, además de entretenernos, nos ahorramos un paseo a la calle