El covid repunta de forma moderada en Castilla y León y provoca 86 ingresos en planta

Así, según los datos facilitados por Salud Pública, la tasa de incidencia de Infecciones Respiratorias Agudas general continúa estabilizada en torno a 600 casos por cien mil habitantes. Pero el informe de la Red Centinela Sanitaria, cerrado a 19 de mayo, ya recoge que en las dos últimas semanas «se aprecia un pequeño aumento de Covid-19» y estima una tasa de 20 casos por dicha población en los últimos siete días.

Los patógenos respiratorios que más están circulado son los rinovirus y enterovirus, los parainfluenza 3, los metapneumovirus y los mycoplasma pneumoniae; aunque se ha detectado también un aumento de muestras centinelas y no centinelas positivas al SARS-CoV-2 y a los virus de la gripe del tipo B.

Las urgencias y hospitalizaciones por problemas respiratorios han aumentado ligeramente en la última semana sobre todo entre las personas de 75 y más años. Suben los casos pero Salud Pública «no descarta que sea algo limitado en el tiempo y de baja intensidad». En las últimas dos semanas se han diagnosticado 367 casos con PCR en mayores.

En cuanto a la ocupación hospitalaria, no hay ningún caso que haya requerido ingreso en una UCI; pero sí 86 personas hospitalizadas en planta en Castilla y León actualmente. Supone un 2% de camas destinadas a pacientes infectados. De ellos, 57 han requerido ingreso por covid o neumonía bilateral compatible con él (el 66,28%) y los restantes 29 han sido hospitalizados por otra causa pero han resultado positivos en SARS-CoV-2 (33,72%).

Valladolid, con 35 pacientes en el Río Hortega y 15 en el Clínico, es la provincia con más casos en planta;seguido de Ávila, con 11 y León y Salamanca, con siete cada una. Solamente ayer, Sanidad registró 63 casos nuevos este martes, de los que 51 fueron diagnosticados el 20 de mayo. Y suma 7.693 fallecidos desde el 11 de mayo de 2022 en los complejos asistenciales. El total de fallecidos desde el inicio de la pandemia es de 10.524 en los hospitales y de 20.095 en total.

Pero este coronavirus es «todavía un virus pandémico y es esperable encontrar ascensos fuera de la temporada invernal. No necesita cambios climatológicos importantes para reaparecer», destaca la directora de Salud Pública, Sonia Tamames Gómez.

Explica asimismo que hay tres razones fundamentales que explican estos, en principio, pequeños repuntes. «Hay que señalar que no ocurre solo con el covid, aparece con otros virus respiratorios y hay gripe incluso en verano. Pero el covid por todo lo ocurrido y porque lo vigilamos más, también se diagnostica más y se toma más conciencia si hay aumentos. Además, la inmunidad termina por bajar, se agota, tanto la natural como la de las vacunas y seguramente ahora mismo haya descendido y además hay que considerar que los virus cambian, pueden estar seleccionando sus ventajas genómicas;pero esto último no parece que esté ocurriendo sino que ya se ha estabilizado la variante», apunta. Y la Agencia Europea delMedicamento, (EMA, por sus siglas en inglés), ha actualizado la vacuna y la próxima temporada se pondrá la JN1», señala.

Añade la doctora Tamames que, vacunaremos previsiblemente en otoño, junto a la gripe, y ya veremos si hay que revacunar. A este coronavirus no le influyen tanto las condiciones ambientales y ha habido buena humedad y no altas temperaturas; lo que no favorece su expansión», añade.

La Agencia ha recomendado actualizar las vacunas COVID-19 para que se dirijan a esta nueva variante para la campaña de vacunación 2024-2025. La composición de las vacunas contra el Covid-19 ha cambiado tres veces desde su primera aprobación en 2020. Como cualquier virus ARN que infecta al ser humano, es propenso a evolucionar rápidamente debido a la acumulación de mutaciones en su genoma durante la replicación en el huésped humano. Además, pueden surgir nuevas variantes del SARS-CoV-2 por recombinación entre cepas de virus que circulan conjuntamente.

Era octubre 2023 la última vez que el seguimiento de la pandemia perdió el calificativo de 'bajo' para pasar al del 'nivel controlado' del que se disfruta en Castilla y León, y en España, desde entonces. Aunque del todo no ha desaparecido nunca, el SARS-CoV-2 se ha mantenido con tan baja incidencia que lo más que ha sumado, entre los mayores de 60 años este año que es lo que se controla como monitor, es de poco más de 180 casos por cien mil habitantes y en los últimos meses de entre 5 y 8 por dicha población. Hay que ir hasta el verano de 2022 para encontrar el riesgo 'medio' en la incidencia. Hasta el actual repunte.