El viernes, ensayo de la Zona de Bajas Emisiones reducida en Valladolid

En Castilla y León son nueve los ayuntamientos que tienen que poner en marcha la Zona de Bajas Emisiones antes del 1 de enero. Son ocho de las nueve capitales de provincia, todas menos Soria, y con el añadido de Ponferrada. Ninguna de las nueve la tienen ya en vigor.

El proyecto actual, impulsado por el nuevo tándem de Gobierno, PP-Vox, tiene una superficie de 1,1 kilómetros cuadrados, según la medición obtenida con Google Maps por las calles que delimitan el área. «0,7 kilómetros cuadrados», según Jesús Julio Carnero, alcalde de Valladolid, dado que el contorno de la Zona de Bajas Emisiones permite la circulación de los vehículos. El perímetro tiene 4,76 kilómetros aproximadamente. La anterior propuesta, del equipo PSOE-VTLP, la que estaba ya debatida y aprobada en el Pleno, alegada y lista para su puesta en marcha definitiva, contabilizaba una superficie de 3,1 kilómetros cuadrados con la circulación restringida y el perímetro se acercaba a los ocho kilómetros (7,8).

Antes de eso, se había incorporado al Plan Integral de Movilidad Urbana, Sostenible y Segura (PIMUSSVA) una 'almendra central' que seguía aproximadamente el mismo trazado que ahora presenta el PP como alternativa, con algo más de superficie restringida, en torno a 1,46 kilómetros cuadrados.

Aunque la Zona de Bajas Emisiones salga adelante con «el mínimo necesario», según se comprometieron tanto PP como Vox en campaña, lo cierto es que podría no ser algo definitivo. La ley contempla que «la superficie de la ZBE debe ser adecuada y suficiente para el cumplimiento de los objetivos establecidos ]…] y proporcional a los mismos». Pero también establece una serie de mediciones que sirvan para comprobar si el rendimiento de la zona de bajas emisiones es el previsto. Es decir, que realmente se reducen las partículas contaminantes que se quieren eliminar. Y esas mediciones y comprobaciones tienen un añadido en la norma. «El proyecto de ZBE deberá revisarse, al menos, a los tres años de su establecimiento y, posteriormente, al menos, cada cuatro años, con el fin de garantizar que se están alcanzando los objetivos planteados en el proyecto, y que responden a lo establecido en este real decreto», dice el texto consolidado publicado en el Boletín Oficial del Estado el 27 de diciembre del año pasado.

Este viernes habrá ocasión de comprobar, a pequeña escala, cómo afecta a la intensidad del tráfico la zona de bajas emisiones ahora propuesta. El perímetro que conformará esa almendra restringida se cerrará al tráfico de 10 a 22 horas. Se puede circundar, pero no cruzar de lado a lado salvo que se sea residente o se tenga un aparcamiento en la zona o se trate de algunas de las excepciones contempladas. Esto es: bus, taxi, bicicleta, vehículo con tarjeta de personas de movilidad reducida, emergencias, vehículos de residentes y vehículos eléctricos y de gas.

Queda delimitado por las calles: San Quirce, Cardenal Torquemada, Rondilla de Santa Teresa, calle Gondomar, calle Chancillería, Ramón y Cajal, Colón, Cardenal Mendoza, Pedro Barruecos, calle Alonso Pesquera, Plaza Cruz Verde, calle Labradores, calle Acibelas, calle Cadena, calle Vega, Plaza de España, calle Miguel Íscar, Plaza de Zorrilla, Paseo de Zorrilla, Calle San Ildefonso y Paseo de Isabel la Católica.

Cuando se implante definitivamente la normativa, no podrán acceder a la zona de bajas emisiones, si se mantienen los criterios anteriores, los vehículos diésel anteriores a 2006 y los de gasolina anteriores al año 2000. Eso, en el calendario previsto, se mantendría hasta el 1 de enero de 2025. A partir de esa fecha, y hasta 2030, habría que estar en posesión de la etiqueta B (gasolina euro 3 y diésel euros 4 y euro 5). No podrían acceder los diésel de antes de 2014 ni los de gasolina previos a 2006. Y a partir del 1 de enero de 2030, solo pasarían los de cero emisiones o Eco. Y los que están permitidos en cualquier caso: servicios de urgencias, taxi, bus, vehículos de empresa. Y se incluían los de personas con ingresos anuales inferiores a 1,3 veces el IPREM (por debajo de 10.920 euros este año).