Los vecinos de la calle Olmedo celebran la demolición del ruinoso edificio del número 4

El ruinoso estado de la edificación, con una red de saneamiento completamente destrozada, ha afectado al bloque del número 2, que durante más de un año ha sufrido las filtraciones de aguas fecales a su zona de trasteros y garajes. «Estamos encantados; si lo tiran hoy, mejor que mañana», subraya al conocer la noticia Pablo Gonzalo, presidente de esta comunidad de propietarios. Él mismo, junto a otros vecinos de su escalera, han tenido que afanarse un día tras otro en achicar este primer sótano de su casa para evitar que el deterioro por las olorosas humedades fuera a más. «También teníamos miedo a que si se caía pudiera afectar a nuestro bloque porque está pared con pared», añade.

La propuesta de acuerdo señala que el coste total de las obras a realizar para mantener las condiciones de seguridad, salubridad y ornato del inmueble supondrían una inversión de 475.254 euros, lo que representa el 62,3% del valor de reposición de la construcción (762.399 euros) por lo que excede del límite del deber legal de conservación y se procede a declarar su ruina. La propiedad tiene un plazo de tres meses para presentar la licencia de derribo. En caso de no hacerlo, el Ayuntamiento lo ejecutará de manera subsidiaria u ordenará su inclusión en el Registro de Inmuebles en Venta Forzosa, lo que bloqueará la posibilidad para que su propietario pueda realizar operaciones en la finca.