Valladolid

Los sindicatos califican de «éxito» la huelga del transporte de viajeros por la jubilación anticipada

Ambos han destacado que el respaldo ha sido muy elevado «a pesar de unos servicios mínimos totalmente abusivos». El dirigente de Comisiones Obreras ha puesto el acento en los decretados por la Junta, «del 50% en los servicios de viajeros y en urbanos y del 100% en los escolares, cuando en otras comunidades esos porcentajes han sido del 30'% y del 50%», respectivamente. Por su parte, desde la Unión General de Trabajadores Juan Antonio Martínez Salvadores ha puesto como ejemplo el caso de la empresa de Autobuses Urbanos de Valladolid (Auvasa), «donde el Ayuntamiento los ha fijado en el 70%».

Precisamente la manifestación de los chóferes de esta compañía por las calles de Valladolid durante la mañana, al grito de «¡coeficientes reductores, para los conductores!» y «¡viajeros y urbano, vamos de la mano!», ha sido el efecto más visible del primero de los siete paros convocados en el sector para conseguir la jubilación anticipada. La protesta, al son de la rumba 'Amigo conductor' de Perlita de Huelva, ha reunido a más de 300 personas colapsando los accesos a la ciudad y ocasionando retrasos de hasta media hora en algunas líneas. Una jornada reivindicativa a la que se sumarán otras seis los próximos 11, 28 y 29 de noviembre y 5, 9 y 23 de diciembre, fecha a partir de la cual la huelga se convertirá en indefinida si no se llega a un entendimiento con la patronal.

Cabe recordar, en este sentido, que sí se ha alcanzado un acuerdo para el transporte de mercancías y sanitario. «Bajo mi punto de vista no lo han hecho correctamente. Tenían que haber hecho reuniones conjuntas para que todos a la vez hubiéramos conseguido lo mismo. Yo entiendo que no es igual lo que cuestan las bases reguladoras de los conductores de mercancías que las del transporte de mercancías o los urbanos, pero por eso este es un día crucial para nosotros. Se nos tiene que ver porque somos conductores profesionales como los demás», reflexionaba Javier del Pozo, el secretario de UGT en el Comité de Empresa de Auvasa.

Ángel Martín Molpeceres, también delegado en Auvasa pero por CC OO, apostillaba que «el pulso está echado» e incidía en que «tenemos los mismos riesgos que cualquier otro conductor del sector profesional y además nosotros llevamos vidas. Es inconcebible que llegando a una edad avanzada, con todos los costes que tenemos asociados a nuestro trabajo., esté dependiendo la vida de los viajeros de una persona que a lo largo de su carrera profesional van perdiendo reflejos», sentenciaba.

Sus argumentos eran idénticos a los que defendía el presidente del Comité de Empresa, Arturo Barrull, de la Candidatura de Trabajadores de Auvasa (CTA): «Esto está requetedemostrado, de hecho los propios informes del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo lo confirman, tenemos lamentablemente tres veces más posibilidad de morir en el trabajo o por causa del trabajo, y lo que pedimos es que se tenga en cuenta». A esto añadía las dolencias asociadas a su actividad, «porque tenemos problemas de audición, de visión, de corazón, de espalda, musculoesqueléticos, y evidentemente creemos que eso debe reflejarse».

Barrull, que aseguraba que «prácticamente el 100% de las personas que podían hacer la huelga la han realizado», incidía en que «no se está pidiendo una subida salarial o una rebaja de la jornada. Estamos hablando de la aplicación de unos coeficientes reductores que desde 2011 están en las leyes y que, por ejemplo, tienen la Policía Local, los pilotos, los ferroviarios con diferentes porcentajes, la minería desde hace muchísimos años...», reseñaba. «No hay un duro detrás de ello, porque en otros estamentos que tienen estos coeficientes hasta se tributa más en los últimos años de vida laboral», explicaba, para apuntar acto seguido que «queremos podernos retirar un poquito antes porque vamos a tener una vejez de peor calidad o vamos a vivir menos años». Algo para lo que pedía «la complicidad de la Seguridad Social», puesto que sin ser su empleador –lo es el Consistorio vallisoletano– «tiene mucho que decir en esto».

El delegado de CSIF, por último, y tras señalar que la concentración había tenido «bastante éxito», ha abundado como sus compañeros en que «en nuestra profesión del transporte urbano de viajeros la mortalidad no tiene tanta incidencia como en el transporte por carretera pero sí la morbilidad, porque en cuanto a enfermedades musculoesqueléticas y cardiovasculares tenemos un porcentaje bastante alto». Tampoco ha dejado pasar la ocasión de afear que «los servicios mínimos han sido abusivos y no se corresponden con los porcentajes que se han recogido a nivel nacional, que están en torno al 50%». Tanto es así, que el Comité de Empresa de Auvasa –compuesto por 17 miembros de los que ocho son de CTA, cuatro de CC OO, tres de CSIF y dos de UGT– analizará y todo indica que aprobará presentar un recurso contencioso-administrativo contra ellos.

El subdelegado de Gobierno en Valladolid, Jacinto Canales, ha trasladado que la jornada reivindicativa se está desarrollando sin incidentes, más allá de la presencia de algún piquete informativo a las puertas de Auvasa, y ha remarcado que los vehículos designados para los servicios mínimos «han salido con total normalidad». Canales ha apuntado también, según informa Ical, que a primera hora también ha habido un piquete de unas catorce personas en la estación de autobuses, que tampoco ha ocasionado problemas.