Valladolid encara diciembre con baja cobertura vacunacional contra la gripe

El objetivo es que la mayor parte de la población esté vacunada antes de que aparezca un brote, se trata de impulsar un aumento en la cantidad de personas que reciban la dosis para prevenir contagios y atenuar los efectos de una enfermedad que, en muchas ocasiones y tal y como coinciden expertos sanitarios, «tiende a ser banalizada». Quizá por eso, desde octubre y hasta la fecha, la cobertura de vacunación en Valladolid se sitúa en un 25,37%, un porcentaje que se encuentra en cifras similares a las de la media de la región (25,84%). Del 21 de octubre al 11 de noviembre la consejería registró el mayor índice de dosis inoculadas, desde entonces y hasta el mes de diciembre la tendencia se sitúa a la baja.

«Aún distamos mucho del horizonte vacunal que señala el Ministerio (más del 65%) pero con este nuevo periodo de captación de personas aún existe un gran margen para mejorar», señala el catedrático de Microbiología y director del Centro Nacional de la Gripe de la OMS de Valladolid, José María Eiros. Por el momento, el virus de la gripe B y de la gripe A (H1N1) «cuenta con una actividad baja en nuestro medio», añade el experto.

Las dosis administradas en capital y provincia alcanzan una cifra de 133.458, aunque se prevé que este número aumente a partir de ahora, después de que el viernes -en pleno puente de la Constitución y la Inmaculada- se abriera la vacunación para combatir esta enfermedad a toda la población en general, algo que el año pasado en la campaña 2023-2024 se produjo en enero. Se trata de adelantarse al umbral epidémico, atenuar los picos de mayor contagio en unas fechas que son caldo de cultivo de propagación al coincidir mayor número de reuniones familiares, quedadas y aglomeración de personas.

«La carga de enfermedad atribuible a la gripe no es despreciable en estos meses de actividad. Si bien la efectividad de la vacuna antigripal no es óptima al 100%, en la medida que se administra se protege tanto a las personas vacunadas como a su entorno y, sobre todo, previene de complicaciones, como asistencia en hospital, ingreso en IVU o fallecimiento», añade.

Entre los motivos principales que llevan a la vacunación no hay variación este año respecto a los anteriores, ya que la razón principal es la de riesgo por edad (registrándose en este tramo 99.604 personas inoculadas), seguido por personas con enfermedades o patologías de base (7.937), personas institucionalizadas (4.418), trabajadores de centros sanitarios (4.014) y sociosanitarios (1.423). A nivel regional, la respuesta de vacunación entre personas mayores de 60 años sitúa a Valladolid en tercer lugar con 58,02% registrado hasta la fecha, por detrás de Soria (61,3%) y Segovia (58,4%). Peores cifras las recogidas en la cobertura antigripal entre menores de cinco años (42,4%) que nos sitúan por detrás de provincias como Salamanca, Ávila, Zamora y León.

«Desde el punto de vista clínico la gripe se caracteriza por un inicio brusco de fiebre alta acompañado por dolores articulares y musculares intensos, abatimiento del estado general y manifestaciones respiratorias como tos o dolor de garganta», explica Eiros. La duración media de esta enfermedad se sitúa entre los cinco y los siete días y deja una profunda astenia residual, es decir, un agotamiento que condiciona el absentismo laboral o escolar.

De todo eso nos protege la vacuna antigripal que puede variar en su composición, su vía de administración o su carga antigénica, al igual que varía su efecto en el organismo y la respuesta inmunitaria en el huésped. «La gripe nos visitará aunque no sabemos con certeza cuándo lo hará por eso la vacuna siempre es un hábito saludable y una excelente medida, máxime en un país donde hay disponibilidad», apostilla Eiros.

En cuanto a la vacunación frente al Covid, el registro oficial de la Consejería de Sanidad indica que ya han recibido su dosis un 40,4 % de cobertura en personas a partir de 60 años. Aunque desde la Dirección General de Salud Pública se anima a todo aquel que lo tenga indicado (la población más vulnerable o con patologías previas) a vacunarse también frente al Covid antes de que se produzcan las correspondientes epidemias.

El director del Centro Nacional de la Gripe de Valladolid habla además de otros virus que circulan con más intensidad que la gripe, como es el virus respiratorio sincitial (VRS), un patógeno causante de bronquiolitis y neumonías que afectan fundamentalmente a los más pequeños. La cobertura frente al VRS supera el 88 % aunque la Consejería de Sanidad hace un llamamiento a la inmunización en los niños nacidos a partir de abril antes de que comience la epidemia de bronquiolitis. En Valladolid hasta el momento 2.027 bebés han recibido la dosis.

En este caso para combatirlo no hay vacuna sino un anticuerpo monoclonal que se administra con muy buenos resultados, porque se ha demostrado un impacto positivo que minimiza los ingresos. El virus circula igual pero los niños que necesitan asistencia hospitalaria se han reducido considerablemente», finaliza el catedrático, quien incide en la necesidad de medios para estudiar el genoma de los virus, su secuenciación y su deriva. Para estudiar de qué forma mutan y, en caso de ser necesario, reformular y ajustar la composición de las vacunas antigripales.