La llegada de la ORA (estacionamiento de pago) a la otra parte del Cuatro de Marzo, desde la avenida de Medina del Campo hacia el sur, ha supuesto una reordenación completa de las callejuelas que parten en torno al eje de las calles Juan ... de Herrera y Francisco de Rincón. Todas ellas fueron adoquinadas y peatonalizadas hace más de tres lustros y todas ellas eran, hasta hoy, utilizadas para aparcar en cualquier recoveco entre árboles y bancos y a escasos centímetros de las ventanas de los bajos de las viviendas. Todo ello ya es historia. El Ayuntamiento acaba de colocar señales que prohíben circular, y por extensión estacionar, por siete de estas vías, en su mayoría sin salida, y ha suprimido así la friolera de 93 plazas de aparcamiento, en realidad ilegales, pero en cierto modo consentidas, situadas en torno a Juan de Herrera.
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La eliminación de estas plazas han sido compensadas, solo en parte, por la reciente apertura del antiguo patio del colegio Felipe II, situado al borde de la calle Juan de Herrera, que cuenta con 61 plazas para residentes, tres de discapacitados y ocho para uso exclusivo de los trabajadores del centro. En el acceso al estacionamiento por la calle Gaspar de Tordesillas se han suprimido también tres plazas de aparcamiento al borde de la fachada de las viviendas.
La reordenación de las callejuelas en torno a la calle Juan de Herrera se ha hecho efectiva hoy, con la colocación de las señales verticales que prohíben la circulación por dos callejones peatonales pertenecientes a la propia Juan de Herrera, otro del Paseo de Zorrilla y las calles Juan del Ribero, Gil de Hontañón y Praves (las seis perpendiculares a Juan de Herrera) y en la calle Simón de Colonia (con acceso, ahora prohibido, desde el paseo de Don Juan de Austria). Todas ellas, adoquinadas desde hace más de quince años, por fin son ahora peatonales de verdad. Los coches, en adelante, no podrán circular ni estacionar en ellas. Noventa lo hacían a diario.
Los cambios en las vías del Cuatro de Marzo alcanzan también al eje de la calle Francisco de Rincón, que articula el último picón hacia el sur de esta parte del barrio. Allí el Ayuntamiento sí mantendrá los estacionamientos sobre dos calles adoquinadas, como son Juan de Nates (entre el paseo de Juan de Austria y Francisco de Rincón) y Pedro de la Cuadra (con acceso desde el citado paseo), si bien serán de uso exclusivo para residentes (zona verde). Entre las dos vías se superan las treinta plazas, aún sin pintar, aunque sí señalizadas, de residentes.
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J. Sanz
De manera que la ampliación de la ORA al resto del Cuatro de Marzo contará con 312 plazas de zona azul (rotatoria) y más de noventa de uso exclusivo de residentes entre el patio del colegio Felipe II y las calles Juan de Nates y Pedro de la Cuadra.
Las dos nuevas zonas de la ORA, que incluye el barrio de La Farola, al otro lado del Paseo de Zorrilla, están ya dibujadas, aunque continúan sin funcionar a la espera de la puesta en marcha de los parquímetros. Estos se mantienen apagados o lucen un mensaje de 'inicializando' en sus pantallas. Tampoco los controladores están aún sancionando y apuntan a que no lo harán, al menos, hasta la próxima semana, siempre que los parquímetros estén ya operativos.
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El problema es que ninguno de los postes luce cartel alguno que informe sobre la fecha real (anunciada por el Ayuntamiento para el pasado 1 de febrero) de la puesta en funcionamiento de la ORA en las 1.878 plazas (azules, de residentes y disuasorias) dibujadas en los barrios de La Farola y el Cuatro de Marzo. No será, al menos, esta semana. Quizá la que viene.
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