Valladolid

El puente de Poniente: un rescate, el 'power point' de adorno y el proyecto «en revisión»

Dos meses después, ya como máximo responsable municipal, comparecía el 18 de julio en el Salón de Recepciones, acompañado del concejal Alberto Gutiérrez Alberca, para anunciar la contratación de la revisión técnica de esos primeros planos. En aquella rueda de prensa, se aportaban las razones sobre la necesidad de que el paso sobre el Pisuerga ganara un tercer carril para dotar de mayor fluidez al tráfico, así como para sumar más espacio para peatones y ciclistas. Se presentaba con un 'power point' y un vídeo, ambos de nueva factura y elaborados sobre el proyecto de 2011, por los que se abonaron 4.356 euros. Era una imagen sin valor técnico, encargada para adornar esa comparecencia.

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Antes de acometer tan relevante promesa electoral, en noviembre de 2023, se borraba del paso sobre el Pisuerga el carril exclusivo para autobuses y taxis con el que contaba la plataforma con el objetivo de eliminar la fila india de turismos a horas punta. El puente, es cierto, cogía más marcha.

El proyecto de reforma, para el que se recibieron ocho ofertas, se adjudicó a la ingeniería Incidec el 24 de octubre del pasado año por importe de 30.248,43 euros y un plazo de ejecución de tres meses. Pero el 29 de enero de 2024, esta firma solicitaba una prórroga de un mes más para la entrega alegando causas imputables a la Administración. Se fijaba una nueva fecha: el 10 de marzo.

Entraba en juego un día después el PSOE, que ha hecho un estrecho marcaje a esta obra. Luis Vélez realizaba una pregunta sobre este nuevo plazo concedido a la adjudicataria. En su respuesta, el equipo de Gobierno aseguraba que ya se contaba con el proyecto y se justificaba el retraso en su entrega en varios aspectos. Así, se numeraba que «las decisiones proyectuales adoptadas» se habían referido fundamentalmente a «la solución más idónea para integrar las nuevas plataformas laterales», la «disposición de la estructura aérea y cubrición de las marquesinas», la «determinación de la sección viaria más adecuada procurando una equidistribución modal del espacio con integración de los elementos arbóreos existentes» y la «adopción de soluciones constructivas con el menor coste posible» y con elementos «con un alto margen de exigencia en cuanto a durabilidad y bajas exigencias de mantenimiento».

En esa misma respuesta, se reconocía al concejal socialista que desde que se había revertido la situación hacía entonces poco más de tres meses, eliminando el carril bus, «se está observando una significativa recuperación de la fluidez del tráfico por el puente, que vuelve a ser itinerario de elección preferente para el acceso rodado al centro». «Por ello, en opinión del actual equipo de gobierno, la actuación que ahora se pretende acometer se revela oportuna y plenamente justificada», concluía el escrito.

Y llegamos a primeros de mayo y el proyecto sigue en el aire. «En supervisión», zanja Carnero cuando se le pregunta. Lo entregado a la oposición ya ha dicho el alcalde que no es lo definitivo, pero este martes se cerró en banda a dar más explicaciones. «Ya se presentará», contestaba también el concejal de Tráfico y Movilidad. Pues eso.