«En casa es como si estuviera sentada en mi puesto, pero la jornada se alarga todo el día»

La tecnología ha permitido a Marta Galán trasladar su puesto de trabajo de auxiliar administrativo en las oficinas del Ayuntamiento de Rioseco hasta su casa en la localidad, en una iniciativa que, además de evitar la propagación del coronavirus, le permite la conciliación familiar.

Desde el lunes, cada día, después de asearse y desayunar, se pone delante de la pantalla de su ordenador, en la que los servicios informático municipales le han instalado el escritorio de su equipo de su puesto de trabajo a través del programa AnyDesk, desde donde poder realizar sus labores diarias en el departamento de Personal, como responder al correo electrónico, preparar nóminas o realizar altas y bajas de contratos, entre otra labores, que realiza de forma telemática por medio de las plataformas de la Seguridad Social, del Sepe (Servicio Público de Empleo) o el Ecyl (Servicio Público de Empleo de Castilla y León). También está en contacto a través de whtasapp o correo electrónico con el resto del personal municipal, la concejala de Personal y el alcalde. «Al final es como si estuviera sentada en mi puesto de trabajo», explica Marta Galán, quien señala que, aunque echa en falta cosas del trabajo como impresos y documentos, «avanzo mucho, porque no hay ningún tipo de distracción, todo es rapidísimo y no quedas nada pendiente, porque siempre tienes un momento para sacarlo adelante ya que la jornada se alarga a todo el día».

Esta trabajadora destaca la importancia de poder conciliar trabajo y familia «en estos días tan difíciles», con tiempo para las labores domésticas y poder jugar y hacer otras actividades con sus hijos, Darío y Lucía, gemelos de 8 años, entre las que no falta el aplaudir cada tarde la labor de los sanitarios en un momento en el que pueden charlar con los vecinos desde los balcones. Además, su marido, Vicente, ha logrado cambiar el turno para que pueda estar con los niños por la mañana. Marta tiene claro que en todos estos días «no he tenido tiempo para aburrirme», pero desea que todo vuelva a la normalidad.