Los operarios intentan limpiar las pintadas de la calle Regalado. H. Sastre

Primeras pintadas en la calzada decorada de la calle Regalado de Valladolid

«Este tipo de grafitis son una falta de respeto a la obra, a los autores y a la ciudad», lamenta uno de los creadores de los murales decorativos sobre el pavimento

J. Sanz

Valladolid

Jueves, 20 de agosto 2020, 07:11

El tramo inicial de la calzada peatonal de la calle Regalado, a partir del cruce con Cánovas del Castillo y Fray Luis de León, amaneció ayer luciendo sobre su recién decorado firme las primeras pintadas. Dos grafitis de vivos colores (rojo y verdoso) ... que recorrían un tramo de la calzada de 28 metros lineales hasta morir sobre una jardinera (también alcanzada por estas dos rayas dobles elaboradas a golpes de aerosol). Se trata del primer acto vandálico contra los murales decorativos, aún en fase de ejecución, que decoran las últimas calles peatonalizadas de la ciudad. De ahí que la respuesta municipal fuera más que rápida y a primera hora de la tarde de ayer un equipo de limpieza se afanó en intentar borrar, sin conseguirlo, los grafitis de la ­calzada con una máquina y golpe de cepillo ante las dificultades para eliminar las rayas fluorescentes que afeaban la decoración, en tonos grises, de esta vía decorada hace apenas un mes y abierta al paso de peatones en agosto.

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«Este tipo de grafitis sin sentido son una falta de respeto a la obra, a los autores y a la ciudad por el coste que supone su limpieza y el efecto que provocan», lamentó ayer el arquitecto Jonatan Viejo, uno de los promotores de la intervención, que estos días alcanza ya al primer tramo, entre Duque de la Victoria y Menéndez Pelayo, de la calle Claudio Moyano. Allí puede observarse ya, a falta de las últimas capas de pintura y del barniz protector, el diseño floral de los motivos dibujados sobre la calzada verde. Los operarios prácticamente remataron ayer la decoración de este tramo y en los próximos días continuará la intervención en el siguiente tramo de esta calle, hasta el cruce con Santiago, y en Licenciado Vidriera, una pequeña vía perpendicular, también peatonalizada, que desemboca en Miguel Íscar.

«Son cosas que pasan, pero es una pena que veas este tipo de actos sobre una obra que acabamos de estrenar», lamentó uno de sus impulsores. Las otras dos calles decoradas, Constitución y Menéndez Pelayo, son transitables desde esta misma ­semana.

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