Ver 30 fotos
Secciones
Servicios
Destacamos
Ver 30 fotos
Una numerosa avanzadilla de Pingüinos ha desembarcado esta tarde de jueves en Esguevillas de Esgueva, localidad con la que la organización de la concentración motera mantiene un fuerte vínculo y una estrecha colaboración. Mantiene una excelente relación no solo porque este pueblo se encuentra en ... una de las mejores y más frecuentadas rutas de la provincia para motos, sino porque además en esta población se encuentra el Museo de la Moto Clásica, el cual abre sus puertas en el Ayuntamiento de este municipio de la ribera del Esgueva. En dos salas del monumental Consistorio -pronto pueden ser tres espacios- se ofrece al público una atractiva colección de motos de diferentes épocas, algunas de las cuales han sido cedidas a Pingüinos para ser expuestas de forma temporal, durante la concentración, en el centro comercial Vallsur.
A partir de las cuatro de la tarde las motos han ido llegando y copando las calles del entorno del Ayuntamiento, donde los moteros y moteras han podido visitar el citado museo de motos clásicas. Durante la visita alguno de los moteros ha podido reconocer en la muestra algún modelo que en su día condujo, como ese ciclomotor con el que empezó a rodar de chaval y con el que comenzó a engancharse al apasionante mundo de las motos.
Noticias relacionadas
Sergio García
La visita al museo motero está dentro del programa de actividades de la concentración de Pingüinos, una costumbre que se consolida como imprescindible, como todo un clásico dentro de esta gran reunión invernal de amantes de la moto, cuyas monturas dejan una imagen única cuando las dejan estacionadas junto a la fachada principal de la imponente Casa Consistorial de Esguevillas de Esgueva.
Con la de este jueves son tres las ediciones en las que la concentración se acerca a Esguevillas de Esgueva, donde además de visitar el Museo de la Moto Clásica también se organizan otras propuestas para pasar una tarde de camaradería. Este año a quienes han rodado hasta Esguevillas se les ha endulzado el paladar con un chocolate y unos bollos, servidos en el centro cívico, donde también se podía degustar unas buenas porciones de pizza. Como merienda también, en un bar de la localidad se ha ofrecido a los moteros unas típicas sopas de ajo. Todo bien calentito para atemperar el cuerpo, pues la tarde ha sido fría, incluso alguna gota de lluvia ha caído en el pueblo. Poca cosa, la verdad. Todo lo contrario que el frío, el cual ha sido como el que inspira el nombre de esta concentración internacional.
Sobre la visita a Esguevillas, desde la organización de la concentración señalan que «Pingüinos no solo se dedica a hacer ruido con las motos, sino que también hacemos actividades de otra índole. Esta mañana de jueves, por ejemplo, hemos estado visitando un colegio de educación especial en Valladolid, algo que cada año nos piden más colegios; y además vamos siempre a Mojados. Este miércoles también hemos estado en Aldeamayor de San Martín visitando una exposición fotográfica sobre toda la trayectoria de Pingüinos, que abarca cuarenta y pico años, así que también estamos extendiendo Pingüinos a pueblos de la provincia vallisoletana». Sin duda, porque además de ocupar alojamientos en otros municipios de la provincia, también los moteros inscritos en Pingüinos se dejan ver por otros pueblos vallisoletanos, donde aprovechan su estancia para conocer su gastronomía y patrimonio, principalmente.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.