El comprador de El Corte Inglés planea una piscina, alojamientos y un gimnasio

El plan de partida, a expensas de la tramitación urbanística que llegará en su momento, es transformar este inmueble, asentado sobre una parcela de 1.565 metros cuadrados y con 17.863 construidos (datos del Catastro) en un gran centro comercial y dotacional de carácter privado.

Ese 'mix', que ya se está cocinando una vez que se ha formalizado la venta, va de abajo a arriba. Lo más cercano a la calle, y por lo tanto la zona más accesible, se quiere reservar para la implantación de grandes marcas de ropa, la parte intermedia daría cabida a un moderno gimnasio y a la zona de estancias para el hospedaje y la sexta altura, incluida la cubierta del inmueble, opta a transformarse en una especie de club social, con un gran restaurante, terraza de verano y una piscina con zona de solárium.

Estas son algunas de las propuestas que se barajan y que son conocidas por el Ayuntamiento desde el pasado mes de agosto, pero que podrían variar en los cuatro meses que quedan hasta que El Corte Inglés eche la persiana definitivamente tras el periodo de las rebajas de invierno.

Ese «mazazo» a la actividad en este entorno que para muchos supone la desaparición de una marca tan emblemática se podría compensar pues con el diseño de usos previsto para esta finca y con la implantación de esas marcas que son imán seguro para las compras. «Con la excepción del supermercado, la actividad de estos grandes almacenes estaba yendo a menos en los últimos años; por eso la empresa se ha desprendido de él», señalan fuentes cercanas a la operación más relevante que se ha registrado en el casco histórico en el último medio siglo.

Así, apuntan que la intención de esta compra es lograr el aprovechamiento pleno de la finca para poner a disposición de los vallisoletanos una oferta variada. Porque el inmueble de Constitución no es solo lo que se ve. Bajo rasante cuenta con cinco sótanos –dos de ellos ahora tienen actividad comercial–, mientras que tres hacen las veces de almacén de la compañía de distribución.

La configuración que se planifica, y que tiene que recibir el visto bueno municipal, es destinar tres de las cinco plantas subterráneas a plazas de garaje, espacios muy codiciados en la zona centro. Los dos sótanos en los que El Corte Inglés ahora tiene ubicado el supermercado, así como la agencia de viajes y otras secciones, se sumarían a la planta de calle y a la primera para hacer de esta franja del edificio un espacio comercial abierto. Las mismas fuentes adelantan que los nuevos dueños ya han mantenido conversaciones con alguna cadena nacional para reservarle parte del espacio de este nuevo modelo, en el que podría tener cabida un supermercado, aunque, de momento, esta opción no se incluye en los intereses del promotor. No obstante, el proyecto «no está cerrado», matizan.

Conjunto Residencial Las Eras también piensa en un gimnasio como parte la oferta. Esta zona 'fitness' podría ocupar la segunda planta y daría servicio tanto al público en general como a los huéspedes que se alojen en los apartamentos turísticos. La zona reservada al hospedaje iría desde el segundo o tercer piso hasta el sexto.

Uno de los aspectos más novedosos es el previsto para la parte alta del inmueble donde se prevé, si la normativa urbanística los permite, habilitar, junto a un gran restaurante y una terraza de verano, una piscina abierta al público en general.

Los planes para el edificio de Constitución obligarán a afrontar una reforma de amplio calado, tanto en la configuración interior y de accesos a los diferentes espacios, como en el exterior. En este punto, el comprador quiere apostar por un diseño singular e innovador en el que el acristalamiento de las fachadas será protagonista. La empresa cuenta con una amplia experiencia en el sector de la construcción, que ya ha demostrado con la rehabilitación del imponente edificio de La Unión y el Fénix, un bloque de su propiedad que ahora acoge apartamentos turísticos. Es solo una de las reformas que esta firma ha llevado a cabo en el centro en los últimos años tras la compra de varios inmuebles completos.