Valladolid

Fernando Cayo en el pregón navideño: «La Navidad encuentra sus valores en la generosidad»

El eterno coronel Tamayo de 'La casa de papel', que ya interpretó al Señor Scrooge, de la obra 'Cuento de Navidad' de Charles Dickens, ha querido volver a meterse en el personaje para llevar a todos los vallisoletanos a aquella época victoriana de hace 200 años y mostrar los valores de la Navidad. Una época que «va mucho más allá del consumismo y encuentra sus valores en la generosidad».

Al igual que en la famosa novela, Cayo ha recorrido los tres espacios temporales, el pasado, el presente y el futuro, lanzando un mensaje de «unión, esperanza y amor». El actor vallisoletano se ha centrado en este famoso relato porque «aunque sea muy viejo, aún tiene mucho que decir». Dickens dibujó a un hombre avaricioso, solitario y oscuro al que la Navidad le estorbaba. Sin embargo, como ha señalado Cayo «una noche todo cambió y aprendió que debía abrir su corazón a lo que importa, a lo que podemos dar. Y eso es lo que significa la Navidad».

La famosa obra del escritor británico se sucede en tres actos. El pasado: «La sencillez de lo que somos», Cayo, indica que este tiempo muestra la persona que fuimos y «de la que a veces nos olvidamos». Un recordatorio que actúa como «semilla de esperanza en lo que fuimos y los sueños que teníamos cuando éramos pequeños». Una época de infancia «a la que la Navidad nos puede remontar».

El presente: «El valor de estar juntos, de celebrar la vida con la Navidad». El artista ha destacado que Valladolid es testigo de la calidez que llena las plazas y refleja la luz que puede aportar al mundo. Cayo ha expresado que el vallisoletano «ofrece lo que tiene» y que precisamente esa riqueza recae en la cercanía. «La vida no se olvida del tiempo con los nuestros, del calor humano».

El futuro: «Posibilidad de redención». El actor y creador ha señalado que «mientras exista vida, existe una posibilidad de dar muerte a lo oscuro». Como ha expresado Fernando, el futuro no está escrito. La Navidad ofrece la posibilidad a quienes están atrapados en miedos «a volver a empezar. Nadie está obligado a vivir en oscuridad, la gente puede elegir ver el mundo con el corazón, abrazar la vida».

Cayo, tomando como ejemplo a Scrooge, ha invitado a todos los vallisoletanos «a ser parte de la transformación». A dedicar esta época de «unión y de familia» a ayudar aquellas personas que puedan parecer «invisibles», dedicar tiempo a todos «los que nos rodean, a vivir para dar. Enfocar la vida en lo que realmente importa y que no tiene valor económico. Un gesto, una sonrisa».

El actor ha incidido en que Valladolid sin duda es una ciudad que puede estar orgullosa de su gente. Y ha expresado un último deseo, «no dejar que la Navidad pase sin hacer cambios, sin realizar un gesto que pueda cambiar la vida cotidiana. Tomar la luz que ilumina las calles de la ciudad para unirse y creer en la magia de los pequeños gestos. En la luz del corazón. En recuperar el tiempo perdido».

Cayo concluyó interpretando las últimas líneas de la novela de Dickens y parafraseando a Scrooge ha asegurado que «no está loco». Ha invitado a vivir el presente «confiando en que las cosas pueden cambiar. Donde la generosidad es la base de todo sin importar la raza o la edad. Donde existe un mundo que debe ser casa para todos».

Una inauguración de la Navidad que se celebra por segundo año y en la que ha estado presente el alcalde de la ciudad, Jesús Julio Carnero. Durante el evento, el primer edil recordó a los «vecinos valencianos» que han sufrido de una manera «inmensa e intensa» un desastre natural que se ha llevado «muchísimas» vidas y ha causado enormes daños materiales, motivo por el que ha invitado a tener «esperanza» en Navidad. El regidor, también ha invitado a tener presentes a los protagonistas de estas fechas, a los niños, que representan a la bondad característica de estas fechas.