Vídeo de Rodrigo Ucero

Comercios históricos de Valladolid: Ferretería Santiago Rodríguez

La ferretería con las llaves de los edificios más importantes de Valladolid

Santiago Rodríguez Rodríguez abrió en 1928 en el número 43 de la calle Ruiz Zorrilla una ferretería a la que bautizó El zamorano

Sonia Quintana

Valladolid

Lunes, 4 de marzo 2024, 00:12

El zamorano Santiago Rodríguez Rodríguez (Fresno de la Carballeda, 1900) salió de su pueblo natal en los años veinte del siglo XX para labrarse un futuro mejor. Y así llegó a Valladolid donde en 1928, en el número 43 de la calle Ruiz Zorrilla -llamada ... así entre 1902 y 1937 en recuerdo del político soriano Manuel Ruiz Zorrilla-, hoy Labradores, montó una ferretería a la que bautizó El zamorano. «Santiago tenía un hermano que tuvo una ferretería en Badajoz. Los dos salieron juntos de Fresno de la Carballeda para prosperar en una capital. Santiago eligió Valladolid y su hermano, Badajoz», explica Jesús Prieto Casado (Valladolid, 1966), actual propietario del comercio que fundó Santiago Rodríguez en Valladolid. «Y los dos se decantaron por montar el mismo negocio».

Publicidad

Quincalla, loza, cristalería, artículos sanitarios, balanzas, herrajes, lámparas de incandescencia, barrenas, infiernillos, tiradores de latón, alambres, juegos de café, galvanizados, hules, morteros de madera, tornillos, orinales, horcas, arandelas, cucharones, sartenes, estufas, hojas de afeitar... «Y cocinas bilbaínas», apostilla Jesús Prieto. «En la ferretería se vendían muchas cocinas bilbaínas y los artículos de ferretería se vendían al peso. Nada de en cajitas de plástico como ahora«. La ferretería estaba ubicada muy cerca de los talleres de Renfe y además entonces había muy pocas ferreterías en Valladolid; por lo que siempre había cola. »Después de la de Villanueva, somos la segunda ferretería más antigua de la ciudad«, cuenta con orgullo el actual propietario de la ferretería, ubicada hoy en el número 22 de la calle Labradores.

Placa que se colocaba en las cocinas bilbaínas. Rodrigo Ucero

Casado con Elisa Guerra Bárcena, el matrimonio tuvo solamente un hijo: Ángel Rodríguez Guerra (Valladolid, 1939), quien se dedicó a la Psicología hasta que falleció su padre. «A Ángel no le gustaba la ferretería pero le prometió a su padre que cuando él faltase, la ferretería seguiría abierta«. Y cumplió su palabra. Dejó su trabajo como psicólogo en el Hospital Clínico y se puso al frente del comercio familiar. »De eso hará unos 45 años«. Y aquí estuvo hasta el mismo día de su muerte, a principios del pasado verano. »Tenía 83 años y esa misma mañana, como había hecho todas, estuvo en la tienda con nosotros. Cuando yo me quedé con la ferretería la única condición que me puso es que él pudiera seguir viniendo a trabajar todos los días. Y así lo hizo. Tenía su propia mesa y hacía sus cosas«, recuerda con cariño Jesús Prieto.

Arriba, Jesús y Laura Prieto, a la puerta de la ferretería Santiago Rodríguez. Abajo, Santiago Rodríguez en el interior y el exterior de su comercio. Rodrigo Ucero y álbum familiar

En 1979 el comercio se trasladó del entonces número 65 de la calle al número 22, a un local en propiedad, y cambió el nombre de El zamorano por el de su fundador, Santiago Rodríguez. Tuvo siempre un empleado, Antonio Rodríguez Bustamante, que estuvo en la ferretería «toda la vida». Antonio se jubiló en 1987 «y entonces entré yo», cuenta el actual propietario, que ya tiene quien le dé el relevo. «Seré la cuarta generación», cuenta orgullosa Laura Prieto Pérez (Valladolid, 1995), quien lleva ya cuatro años trabajando junto a su padre. «Yo me he criado en la ferretería. Tengo muchos recuerdos de pequeña jugando por aquí», confiesa esta graduada en Finanzas. «Somos una ferretería atípica porque tenemos poco público de paso. Trabajamos sobre todo para empresas y estamos especializados en cerrajería. Ahí somos un referente. Hemos amaestrado el Ayuntamiento, colegios... y las fábricas de Renault de Valladolid y Palencia».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad