Comercios históricos de Valladolid: Bernuy
La charcutería que presumía de sus orígenes segovianosSecciones
Servicios
Destacamos
Comercios históricos de Valladolid: Bernuy
La charcutería que presumía de sus orígenes segovianosNatural de Bernuy de Porreros, este segoviano nacido en 1910 se fue a Madrid en busca de mejor fortuna. Allí comenzó a trabajar en una tienda de alimentación hasta que le surgió la oportunidad de hacerse con el traspaso de un bar ubicado en la emblemática plaza de Manuel Becerra. «El bar era muy famoso. Iban cantantes de ópera, toreros, artistas... Mi padre llegó a ser el jefe de la clac de los principales teatros madrileños», recuerda Vicente Calle Olmos, hijo de Cayetano Calle Galindo, fundador en 1949 en Valladolid de Bernuy, negocio que nació como salchichería en el número 1 de la Plaza de España (esquina con Duque de la Victoria) y acabó convertido en una importante empresa de productos cárnicos.
Noticias relacionadas
Sonia Quintana
Sonia Quintana
Sonia Quintana
Cuando terminó la guerra, Cayetano Calle regresó a su pueblo natal y allí se casó con Agripina Olmos Martín (Bernuy de Porreros, 1913). La familia Olmos ya se dedicaba entonces a producir derivados del cerdo, en particular, chorizo. «Mi abuelo paterno era maestro albañil y le hizo a su consuegro la nave donde empezaron a fabricar embutidos y acabó trabajando en el negocio, con una fábrica en Martín Muñoz de las Posadas. En Madrid vendía a diferentes tiendas. Por uno de sus clientes se enteró de que en Valladolid se traspasaba un negocio de alimentación y mi padre no lo dudó y se vino a Valladolid», cuenta su hijo Vicente Calle Olmos (Martín Muñoz de las Posadas, 1941), quien dio el relevo a su padre al frente del negocio tras la jubilación de éste a los 67 años.
En 1950 Cayetano Calle inauguró el comercio tras poner el local a punto. «Era todo de mármol: el suelo, las paredes, los mostradores... La tienda tenía 80 metros y un obrador de 200. Con mi padre vino mi tío Eutiquio a echarle una mano», recuerda Vicente Calle. Lo bautizó con el nombre de su pueblo: Bernuy. «Recuerdo a mi padre siempre impecable tras el mostrador. Con su chaqueta, su mandil blanco y su corbata negra. Eran cuatro dependientes, más mi tío y mi padre», apunta Vicente, el único de los hijos del matrimonio Calle Olmo que trabajó en el negocio familiar. «Soy el mayor y el único varón», apostilla Vicente.
Tras terminar sus estudios de perito mercantil en Valladolid, Vicente se fue a Madrid a estudiar Cárnicas y después Charcutería en París. «El verdadero éxito del negocio fue siempre el producto. Era espectacular. Y la honradez. Eso lo aprendí de mi padre. Ser honrado en un negocio es muy importante». Los años setenta del siglo XX fueron años gloriosos para este negocio familiar, que llegó a tener tres sucursales más en Valladolid: en la calle Montero Calvo, en la plaza de las Batallas y en Fuente el Sol. Y una fábrica en la calle Caamaño. »Era el obrador de todas nuestras charcuterías y también vendíamos al por mayor. Llegamos a tener hasta 39 trabajadores». De los tres hijos de Vicente -Jerónimo, Eva y Simón-, solamente el pequeño estuvo involucrado en el negocio familiar. La tienda original cerró sus puertas en 1999. Las otras habían ido cerrando años antes. Y la fábrica de Delicias bajó la persiana hace apenas siete años.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.