Isabel Gallegos, oncóloga vallisoletana y colaboradora de 'Más allá del espejo'

«Los cuidados estéticos ayudan a la mujer a llevar mejor el cáncer de mama»

Explica esta médico vallisoletana que «el proyecto 'Más allá del espejo' «es una iniciativa de los laboratorios Pfizer que nos propuso este manual a especialistas de diferentes áreas para poder dar un enfoque integral a los muchos aspectos implicados en el cáncer de mama y que no están recogidos en las guías de la práctica clínica. Son realmente importantes. La guía está dividida en siete áreas: Dermatología, Cirugía Plástica, Medicina Estética, Salud Bucodental, Ginecología, Nutrición y Fisioterapia».

El objetivo es, por lo tanto, cubrir todos los aspectos, «tanto para la paciente como para los oncólogos que, en ocasiones, te hacen preguntas que realmente no sabes resolverles con verdadera solvencia, con el soporte de información rigurosa y accesible. Y, muchas veces, para evitar problemas, les dices que mejor no se hagan determinada cosa cuando en realidad podrían. Nosotros en las consultas, cuando diagnosticamos, explicamos a la paciente a qué se va a enfrentar, los efectos secundarios; pero ya cómo mitigarlos, y este detalle es algo que aporta ahora esta guía», añade la doctora Gallegos.

Lo que tiene muy claro esta especialista vallisoletana es que «cuando la mujer se siente estéticamente mejor, cuando se reconoce, no hay una ruptura con su yo de siempre y todo va mejor. Verte bien, con la menor alteración física posible, provoca un efecto emocional muy positivo». Recoge así aspectos tan relevantes como el cuidado del cabello, de la piel –necesidad de hidratarse mucho–, técnicas de micropigmentación para las cejas que muchas veces desaparecen y su ausencia cambia mucho la cara y la expresión, la boca... además puede prepararse todo esto antes del tratamiento para que resulte menos agresivo, conocer las pelucas, pañuelos, los gorros fríos... todo para que la alopecia no sea tan radical, nutrición... hay mucho que se puede hacer para sentir menos el cambio y si se sienten bien, se sienten menos enfermas, llevan mejor la enfermedad. Es muy positivo. También afecta a la salud sexual, hay secuelas importantes, menopausia precoz, mayor sequedad... de ahí la participación de ginecólogos. Es importante dar este apoyo», defiende Isabel Gallegos.

Asimismo indica que «a veces, te preguntan si pueden hacerse una limpieza facial, o la depilación láser o cómo cuidar la cicatriz y problemas de piel que provoca la mastectomía... y la guía da respuestas».

Y todo ello teniendo en cuenta que, cada año, «en España se diagnostican 35.000 nuevos casos de cáncer de mama», pero destaca que ahora la supervivencia «es muy buena, del 85% a los cinco años», explica.

En cuanto a la incidencia, esta especialista indica que «hay un aumento en los últimos años porque está ligado a la edad, y la población está más envejecida. Y también hay más diagnóstico y más precoz. Hemos avanzado mucho en esto. Y además, es cierto, los hábitos han empeorado, el tabaco al que la mujer se ha sumado de una forma preocupante, el alcohol... hay que hacer dieta mediterránea, la cocina de la abuela de toda la vida y evitar productos procesados». Añade asimismo que, «aunque en el cáncer hay factores genéticos que no podemos controlar, sí podemos hacer mucho en prevención, como los hábitos saludables, tratar de evitar el estrés, dormir suficientemente, hacer ejercicio físico... Todo esto es básico, muy importante y hay que enseñarlo desde el colegio, desde que se es pequeño, crecer con esta cultura saludable».

Y «también en el cáncer de mama avanzado, también lo demandan y pueden tener una buena calidad de vida». Explica esta oncólogoga que, efectivamente, «el cáncer de mama metastásico hoy por hoy es incurable, tiene difícil pronóstico; pero en lo que sí se ha ganado mucho es en calidad de vida. Sabemos que es incurable, pero el objetivo es cronificarlo cuanto se pueda, al máximo». Y es que el cáncer, en ello insiste la doctora Gallegos, «es una enfermedad muy difícil, muy compleja. No es una infección que la tratas y se cura. Es un cambio a nivel biológico y genético, una alteración en la dinámica de las células». Pero hay motivos para el optimismo. «No sólo el diagnóstico, cribados... que han mejorado mucho, sino la investigación, en el conocimiento del genoma humano. Saber qué genes son los afectados, la identificación y el conocimiento permiten frenar su extensión, llevar a efecto terapias personalizadas, intentar dar con la diana si comprendes los mecanismos. Cada mujer reacciona de diferente forma a un mismo cáncer, incluso en la misma paciente una recaída es distinta».