Carnero confía en que Valladolid abandone el viernes la «mal llamada integración» actual

Preguntado por el anuncio de la Plataforma en Defensa del Soterramiento de concentrarse el viernes ante la reunión de la SVAV, el regidor recordó que la «principal movilización social» en este asunto «se produjo en mayo en las elecciones municipales», cuando los vallisoletanos otorgaron la mayoría a las fuerzas políticas que optan por esta fórmula, PP y Vox, frente a las que «no son tan proclives». Por tanto, respaldó la movilización social del viernes, «una expresión de que Valladolid quiere entrar en otra fase de modernidad, la del soterramiento».

Al respecto, el primer edil apostó por «iniciar» una fase de diálogo «muy importante», motivo por el que consideró que «cuando uno arranca, no puede empezar dando un carpetazo», aseguró en relación a si el ministro de Transportes, Óscar Puente, acudirá el viernes a enterrar o no el soterramiento.

Carnero recordó que la ley de movilidad cuenta con artículo dividido en apartados que analizan los porcentajes que pondría cada administración. «Tiene una letra A, otra letra B y otra C, pero también una letra D, que dice que estos porcentajes de lo que le corresponde asignar al administrador ferroviario podrán incrementarse por parte del Consejo de Ministros», comentó. Por tanto, añadió que el porcentaje que tenga que llevarse a cabo en el soterramiento de las vías del tren de la ciudad de Valladolid «será el que se acuerde y determine por las partes implicadas».

En la actualidad sería del 50% por parte de la Administración del Estado y el 25 de la Junta y el Ayuntamiento en cada caso. En este punto, consideró que es una «decisión que puede asumir perfectamente el Consejo de Ministros, teniendo a un ministro de Valladolid, qué mejor valedor para defenderlo; o incluso incluir una aportación menor por parte del Ayuntamiento». «A mí no se me ocurre otra cosa», apuntó.

Respecto a la llegada del operador francés Ouigo, Carnero destacó que se trata de un proyecto que el PP «ya llevaba en campaña electoral». «Ya creíamos en él», sentenció el alcalde, quien rememoró que en cuanto tomó posesión se reunió con la dirección de la firma para «apoyar y apostar por algo fundamental». «Lo único que quiero y que veo es que Valladolid necesita más frecuencias. Y las estamos ganando», dijo.

En respuesta al ministro de Transportes, que señaló que esta operadora «distorsione el mercado», Carnero defendió que a partir del 18 de abril «se universaliza la posibilidad» de que los ciudadanos viajen en un transporte «eficiente y cómodo», además de otras ventajas, como que «los niños de hasta tres años viajen gratis y con unas tarifas a partir de los 9 euros». «Eso, para mí, no es distorsionar ningún tipo de realidad. Lo que tenemos que conseguir es que cada vez viajemos más en un medio de transporte cómodo, rápido y sobre todo sostenible».

En esa idea, apostó por el mayor número de empresas que «operen» en el tramo Valladolid-Madrid, y que en este caso se extiende hasta Alicante. «Bienvenido sea», sentenció.