De La Antigua a la catedral: las 115 iglesias, ermitas y cementerios que la Iglesia inmatriculó en Valladolid

El informe, presentado por la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, concluye que la Iglesia no inmatriculó durante esos años ningún bien que no contara con la documentación requerida (todos los casos se ajustan a la legalidad), pero, al mismo tiempo, abre la puerta a la reclamación de administraciones o particulares que puedan demostrar que son los titulares de esos bienes inscritos por la Iglesia.

Así, de acuerdo con ese cambio legal, el Arzobispado inmatriculó «la práctica totalidad de los templos distribuidos por todo su territorio», explica el obispo auxiliar, Luis Argüello, quien subraya que el proceso se hizo «conforme a la legalidad vigente. Los edificios inmatriculados han sido lugar de culto de manera ininterrumpida, en muchos casos durante siglos, la potestad dominical de la Iglesia Católica sobre ellos ha sido continuada, probada de manera indiscutida por la posesión pública, pacífica, ininterrumpida y en concepto de dueño. No se trata de ningún privilegio, sino del ejercicio de un derecho establecido», concluye Argüello. La vicepresidenta Carmen Calvo abundó en esa legalidad del proceso.

El documento que maneja el Gobierno (a partir de los «datos e información recabada por parte del Ministerio de Justicia en los registros de la propiedad») incluye 115 inscripciones en la diócesis vallisoletana, si bien algunas fueron este miércoles matizadas por parte del Arzobispado, ya que se incluyen registros erróneos o ya subsanados.

Por ejemplo, el listado enviado al Congreso de los Diputados incorporaba cuatro fincas rústicas en La Unión de Campos que no se corresponden a inmatriculaciones, sino que son fruto de una herencia. También se ha aclarado la datación errónea de algunas propiedades, vinculadas sobre todo con locales anexos a las parroquias de San Nicolás, San Miguel y Santiago. O dos propiedades en las localidades leonesas de Valderas y Gordoncillo, correspondientes a una herencia de 2006 y posteriormente registradas. Además, se caerán de la lista dos ermitas en Medina del Campo (la de San Roque y la del Amparo) que, si bien fueron inicialmente inmatriculadas por la Iglesia, finalmente se ha reconocido la titularidad por parte del Ayuntamiento medinense, después de que este documentara la propiedad.

De hecho, la publicación de este listado de propiedades inmatriculadas por la Iglesia desde 1998 abre la puerta a posibles reclamaciones por parte de administraciones o particulares que puedan demostrar con documentos que son propietarios de esos templos, ermitas, cementerios, fincas o locales. «La Iglesia no quiere que esté a su nombre nada que no sea suyo», indica Argüello. .

En Valladolid, el Ayuntamiento (a partir de una moción presentada por Sí Se Puede en julio de 2016 y otra posterior de tres años después) acordó en pleno que «una vez publicado el censo de inmatriculaciones» –y eso ocurrió el martes–, iniciaría «los trámites de recuperación de propiedades inmatriculadas que pudieran ser consideradas patrimonio de la ciudad de Valladolid».

El concejal de Planeamiento Urbanístico y Vivienda, Manuel Saravia (Toma la Palabra) ya dispone del último listado correspondiente a la capital y ha iniciado su estudio, por si hubiera lugar a reclamaciones. «Debemos revisar despacio el ámbito de cada uno de los casos, examinando los catastros previos (de antes de 1998) y las superficies y construcciones que se vinculan a cada uno de esos inmuebles, pues en algunos casos ya se indica casas y locales». «No presuponemos nada, psimplemente debemos estudiar las operaciones, cumpliendo por completo lo que el Pleno municipal aprobó en su día».

Pedro Herrero, concejal de Planificación yRecursos, recuerda que ya en julio de 2016, cuando se requirió al Arzobispado información sobre las inmatriculaciones en la capital, se revisó el listado sin que, en principio, hubiera casos que pudieran dar lugar a una reclamación. «Seguramente haya algún caso escandaloso en el país, en otras ciudades o provincias, pero en la capital no parece que se hayan producido situaciones de ese tipo, aunque se estudiará», indicó.

En el caso de la ciudad, se han producido, entre los años 2007 y 2014, un total de 23 anotaciones de inmatriculación. Entre ellas, las de iglesias como San Ildefonso, San Andrés, María Magdalena,San FelipeNeri y Pilarica, o la basílica del Santuario, además de casas y locales parroquiales en San Martín o el Salvador. En el total de la provincia son 115 registros (el Arzobispado reconoce 111, tras subsanar esos errores en Medina del Campo y La Unión de Campos), más esos dos en localidades leonesas. Es una de las cifras más bajas de España. Solo en las tres provincias del País Vasco, Cádiz, Ciudad Real, Ceuta y Melilla la Iglesia ha inmatriculado menos propiedades.

¿Por qué? Desde el Arzobispado de Valladolid explican que ese proceso de registro ya había producido en Valladolid con anterioridad a ese año 1998, ya que la Iglesia había inscrito con anterioridad esas propiedades, al disponer de la documentación precisa para hacerlo. Desde la diócesis se destaca el importante papel de Vicente Vara, quien fue vicario general de la diócesis (falleció en julio del año pasado), en la recopilación de escrituras y documentos acreditativos de la propiedad.

Castilla y León, con 10.243 bienes, es la autonomía con más bienes inmatriculados en este periodo, según los datos recogidos por Europa Press. Le siguen Galicia y Cataluña con 7.131 y 4.192, respectivamente.

La modificación de la Ley Hipotecaria hizo posible que desde 1998 se pudieran inscribir los bienes eclesiásticos destinados al culto con la simple certificación expedida por el diocesano correspondiente y esta circunstancia, unida a que mantuviese el privilegio de la inscripción mediante certificación diocesana, supuso «una masiva inscripción en el Registro de la Propiedad de estos bienes a favor de la iglesia», destacaron desde el Gobierno, informa Ical.

La Coordinadora Estatal para la Recuperación del Patrimonio Inmatriculado por la Iglesia Católica Recuperando, que agrupa a una veintena de colectivos, también con representación vallisoletana, considera un «absoluto insulto» y una «gran trampa» que haya que reclamar en los tribunales los bienes inmatriculados por la Iglesia. «Nos parece un absoluto insulto. Están promoviendo 35.000 litigios ante los tribunales. Es la gran trampa», ha explicado a Europa Press Andrés Valentín, quien ha alertado de que si hay bienes que no se reclaman «se da por hecho que son de la Iglesia». Además, ha cuestionado que miles de municipios de pocos habitantes tengan capacidad para litigar procesos que se prologan «durante 20 años», asegura Andrés Valentín, portavoz del colectivo. La plataforma critica que el documento presentado por el Gobierno es «parcial», ya que no incluye los bienes inmatriculados entre 1946 y 1998 ni «las notas simples que debían haber acompañado al listado», para conocer fechas o superficies, informa Europa Press.

Desde la asociación Europa Laica, el portavoz Juanjo Picó ha mostrado su «satisfacción por que, por primera vez, se haya publicado el listado», pero ha añadido que «el resto son peros». En primer lugar, Picó ha lamentado que «solo cubre» los 34.961 bienes inmatriculados desde 1998, cuando la asociación los cifra en más 100.000 desde 1946.