Segovia
El temporal de lluvia y nieve causa un «desastre» en el campo segovianoSecciones
Servicios
Destacamos
Segovia
El temporal de lluvia y nieve causa un «desastre» en el campo segovianoEl presidente provincial de Unión de Campesinos en Segovia, César Aceves, sostiene que los años solo se parecen entre ellos en el número de días. Y, en 2024, ni eso, al ser un año bisiesto. Ejemplifica así las notables diferencias entre los problemas que sufrió ... el campo segoviano en 2023 y los que asegura va a sufrir en 2024. Si hace meses los agricultores pedían lluvia al cielo para lograr una buena producción en sus cultivos, durante las últimas semanas tan solo piden una tregua de agua.
El temporal de lluvia y nieve que azotó la provincia de Segovia durante la pasada semana ha sido la gota que ha colmado el vaso. El campo segoviano ya estaba resentido por episodios de lluvia más o menos frecuentes desde noviembre, pero las precipitaciones de la tercera semana de enero han echado al traste las esperanzas de un buen número de agricultores segovianos. «Es un desastre. Las tierras que se han inundado ya no valen para nada», subraya Aceves.
El presidente de la organización agraria habla de la misma situación en toda la provincia, aunque existen zonas, como la de Fuentesáuco, que parecen haber resistido mejor las inundaciones. Otras, como la campiña segoviana o el nordeste, se han llevado la peor parte y permanecen con hectáreas de cultivo totalmente anegadas. «Depende también del tipo de suelo. En zonas donde el suelo sea más sano la semilla y las raíces se han desarrollado mejor», comenta.
Las intensas precipitaciones han llegado en el peor momento, cuando la mayoría de los agricultores ya habían iniciado la sementera. Con la semilla ya en la tierra, el crecimiento de los cultivos se antoja imposible en tierras inundadas. «Si están encharcadas o con mucho agua, se desplaza al oxígeno y la semilla se ahoga», explica Aceves.
Pero no solo afecta a las tierras donde la raíz todavía es débil. También a aquellas donde la planta ya está desarrollada, que sufre por la falta de semanas de frío. «Para el cereal, por ejemplo, hace falta frío. Así se desarrollan con potencia. Son muy someras», asevera. La falta de heladas también ha afectado a la cosecha del girasol, ya que el hielo «ayuda a sacar la humedad del suelo».
Aceves reconoce resignado que los trabajadores del campo tienen que acostumbrase a los cambios en el clima de la provincia de un año para otro, pero lamenta que la meteorología no esté acompañando durante los últimos meses. «Es un proceso que venimos arrastrando desde que empezó a llover en noviembre. La sementera ya empezó mal y luego la niebla no nos ha dejado trabajar», afirma sobre unas condiciones que han lastrado, sobre todo, al cultivo de cereal.
Las lluvias de los últimos días han «arrastrado» con la parte fértil de las tierras de cultivo, dejando con muy poco margen a los agricultores que han sembrado durante el otoño. «Hay zonas donde han perdido la producción. Lo declararán barbecho, zona improductiva», comenta. En zonas como Etreros, pone como ejemplo, ni siquiera les ha dado tiempo a sembrar trigo. El cultivo de todas las tierras con girasol tampoco es la solución.
Con un panorama tan poco esperanzador, el presidente provincial de UCCL ya advierte de un año con una menor producción tras haber sufrido una «mala implantación del cultivo». Por ello, espera que durante el próximo mes el tiempo les acompañe con semanas sin precipitaciones. De momento, no están previstas nuevas lluvias en lo que queda de enero. «Queremos que deje de llover para que se normalice la situación un poco», declara. Si el tiempo esta vez sí acompaña, el cultivo de girasol puede ser una alternativa para que algunos agricultores puedan intentar salvar el año.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.