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Provincia de Segovia
La feminización de la sanidad: dos de cada tres profesionales son mujeresColegiación ·
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La feminización de la sanidad: dos de cada tres profesionales son mujeresColegiación ·
Los hombres son mayoría en dos de doce colectivos sanitarios en la provincia de Segovia, que son veterinaria y protésico dentalEn diez de doce profesiones sanitarias las mujeres 'mandan' en cuanto a que son mayoría en la provincia de Segovia. Solo hay dos en ... las que las plantillas son predominantemente masculinas: veterinaria, aunque se acortan las distancias año a año, y protésico dental. La colegiación y las diferentes disciplinas y áreas de la atención a la salud se conjugan cada vez con más frecuencia en femenino: desde la medicina, que hasta el pasado decenio era un colectivo masculinizado, hasta la abrumadora mayoría que se da en la enfermería.
No queda ahí. Ellas también son más en las oficinas de farmacia, en las consultas de psicología, en las clínicas de fisioterapia, en los servicios de logopedia o de terapia ocupacional, en los despachos de dentistas... Dos de cada tres profesionales que velan por la salud en la provincia de Segovia son mujeres.
De los algo más de 3.000 trabajadores que están registrados en los distintos colegios profesionales, más de 2.030 son sanitarias, a tenor de las conclusiones que se extrae del Instituto Nacional de Estadística. En cinco años, más de doscientas mujeres se han sumado a distintas áreas sanitarias de la provincia de Segovia en sus respectivos desempeños.
Sin embargo, la feminización de la sanidad pública está coja. El aumento progresivo experimentado en el personal que trabaja en centros de salud, consultorios, clínicas y hospitales no se ve traducido en la misma proporción en la asunción de puestos de responsabilidad. Es más, el INE pone de manifiesto la merma de las retribuciones que perciben las sanitarias si se compara con los salarios medios de los hombres que también trabajan en este ámbito.
Sus percepciones pueden situarse hasta cinco nóminas por debajo. Es decir, pueden cobrar hasta 5.756 euros menos al cabo del año, según critica la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Comisiones Obreras (CC OO).
En esta brecha salarial tiene bastante que ver el hecho de que las especialidades por las que se decantan los hombres, como por ejemplo Cirugía o Traumatología, suelen estar mejor pagadas y disfrutan de unos complementos económicos más suculentos.
Esta diferencia se traslada a los números del INE que retratan los medios humanos con los que cuenta la sanidad a partir de las colegiaciones. Al echar el cierre al año pasado, la profesión sanitaria mayoritaria en la provincia de Segovia era la de enfermero, con 912 trabajadores inscritos en el Colegio Oficial. Es, por mucho, el desempeño más feminizado en el sistema público segoviano. Por cada hombre hay entre siete y ocho mujeres. A fecha del 31 de diciembre, el Instituto Nacional de Estadística contabilizaba 111 enfermeros y 801 enfermeras; en conjunto, un 4,5% más que cinco años atrás, con aportaciones similares por parte de ambos géneros (21 hombres y 19 mujeres).
Además, se da la circunstancia de que todos los inscritos en el registro colegial en el que se basa el organismo estadístico no estaban jubilados, lo que también distingue el ejercicio de la enfermería del de la medicina en la provincia.
Las mujeres son mayoría en la colegiación de médicos. Así lo pone de manifiesto el informe del INE, que en cuanto a la cantidad de profesionales se queda cerca de paridad con la enfermería. En concreto, el estudio da cuenta, a finales del curso pasado, de 903 facultativos, de los que 470 son mujeres. Es decir, el 52%, con una tendencia creciente a la feminización de las plantillas.
A lo largo del último lustro, el saldo de altas y bajas muestra la incorporación de 64 galenas; mientras que en el mismo periodo de tiempo, son doce los médicos colegiados que suma el colectivo sanitario en la provincia de Segovia. La incorporación de tituladas procedentes de las facultades ha sido mayor y más rápida que la de los graduados. Eso ha hecho que se haya dado la vuelta a la demografía imperante hasta el pasado decenio. La feminización de la profesión médica se ve mejor si el espejo retrovisor de la comparación se enfoca diez años atrás. En 2012, el INE recogía 373 colegiadas, por lo que en este tiempo el estamento ha acogido cerca de cien mujeres más; mientras que la adscripción de hombres no solo no creció, sino que disminuyó en un decenio ya que al cierre de 2022 había quince menos.
La mayor presencia de trabajadoras en distintas ramas de la sanidad está contribuyendo a sostener la sangría provocada por el final de las trayectorias laborales al alcanzar la edad legal de los 65 años y la falta de un relevo generacional. En el Colegio Oficial de Médicos, siete de cada diez de los 240 facultativos jubilados son hombres.
Hay otras profesiones sanitarias contempladas en la radiografía del INE que, a través de los datos, ponen de relieve la feminización casi aplastante de determinados colectivos. Para muestra, el botón del cuarta rama con más colegiados en la provincia, que es la de los farmacéuticos, en la que tres de cada cuatro trabajadores son mujeres. Hay otras disciplinas menos abundantes en cuanto a personal activo, pero que también presentan el predominio femenino en sus plantillas.
En psicología, hay ocho colegiadas por cada diez profesionales. En logopedia, esa hegemonía todavía crece más, hasta el 87% de las colegiaciones. El predominio es casi absoluto en el ejercicio de la terapia ocupacional, donde de los 56 inscritos, solo dos son hombres, una representación masculina que no ha variado en cinco años. Al fijarse en la colegiación de dentistas, las diferencias entre géneros se estrecha, aunque la proporción es de un profesional por casi dos sanitarias especializadas.
El estudio del INE también refleja que el ligero aumento que experimenta el colectivo de ópticos-optometristas es gracias a las dos altas femeninas que se han producido en el lustro más reciente (de 59 profesionales, 44 son mujeres). Más minoritario es el gremio sanitario de podólogos, con 28 colegiaciones registradas a finales de 2022, de las que quince son de mujeres.
La masculinización en el plantel de trabajadores permanece en dos ramas. Una es la de los protésicos dentales y la segunda es la veterinaria, que además es la tercera en la provincia en lo que respecta a colegiados. El Instituto Nacional de Estadística expone, a través de los números, que la femenización de este estamento avanza, ya que al comparar la situación laboral de hace cinco años con la actual, la diferencia entre ambos géneros se va limando.
Al término del curso pasado había, en total, 387 colegiados (25 más que un lustro atrás), de los que 225 eran hombres. La representación masculina ha menguado ligeramente con respecto a 2017, cuando había 229 veterinarios. Por contra, las profesionales de este colectivo sanitario que trabajan en la provincia han sumado 29 colegiadas en ese mismo periodo y son las que sostienen y justifican el relevo en ese tiempo.
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