Autoescuelas, taxis y camioneros quieren prorrogar la ayuda de 20 céntimos en el combustible

Las autoescuelas segovianas, por ejemplo, intuyen de las informaciones conocidas hasta ahora que el Ejecutivo central plantea «restringir al ámbito profesional o a determinados colectivos vulnerables» la bonificación que ha venido concediendo de 20 céntimos por litro de carburante.

La presidenta de este sector en la provincia de Segovia, Irene Herranz, comparte la reivindicación nacional de que esta actividad se considere en el grupo de profesionales del transporte. «La herramienta fundamental de nuestro trabajo es el vehículo y, por tanto, dependemos del consumo de combustibles fósiles», alega la responsable de las autoescuelas.

Estos centros de enseñanza están, pues, a expensas de que el Gobierno de la nación detalle las condiciones de acceso y los aspirantes a aprovecharse de la bonificación, si es que al final decide mantenerla a partir del 1 de enero de 2023. Herranz incide en el impacto que ha tenido en los últimos meses la escalada de los costes en gasolina y el gasoil, además de «los altos precios de la energía y de los suministros». Estos encarecimientos se reflejan en las cuentas de resultados de las autoescuelas en que «el margen de beneficio, si lo hay, es exiguo».

La representante del sector segoviano añade, además, que el 'boom' de matriculaciones que hubo en 2021 se ha desinflado, sobre todo a partir de este pasado verano. El objetivo de cubrir los costes se hace cada vez más cuesta arriba a pesar del rédito conseguido meses atrás.

Herranz precisa que las tarifas de las clases prácticas que se aplican en la provincia a los futuros conductores «dejan un margen muy justo» al centro. «A muchos les puede parecer caro, pero hay que tener en cuenta el consumo de combustible, el profesor, los gastos de mantenimiento de los vehículos...». Cada práctica cuesta entre 20 y 23 euros, detalla la presidenta de las autoescuelas segovianas.

20-23euros es la horquilla en el precio que se paga por cada práctica en el proceso de sacarse el carné de conducir

Aunque ahora el precio del barril de petróleo lleve un tiempo más contenido, el gasóleo, por ejemplo, «sigue estando un 31% más caro que a principios del año», advierte por su parte la Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas de España (Fenadismer), que al igual que las autoescuelas también reclama celeridad y concreción al Ejecutivo de la nación para aclarar si al final habrá prórroga de la ayuda al repostaje más allá del 31 de diciembre. Con los actuales costes que han de afrontar las empresas, esta federación subraya que la factura media que ha de pagar un transportista por cada camión es de 75.000 euros anuales, con el plus en los gastos mensuales de unos 1.500 euros más que lo que pagaba al comienzo de este año.

En el ámbito provincial, la Asociación Segoviana de Empresarios del Transporte (Asetra) aboga también por la prórroga del descuento de 20 céntimos por cada litro de combustible. Desde el punto de vista de los profesionales, «toda ayuda es bienvenida», afirma el director de la patronal del sector en Segovia, Fernando García. Los industriales reconocen el ahorro aparejado a la bonificación, lo que ha permitido a muchos subsistir durante estos meses de escalada de costes en las estaciones de servicio, en los que además se ha notado un cierto repunte del trabajo en el ámbito sobre todo de las mercancías.

Si un camión, tipo trailer, consume unos 3.000 litros de combustible al mes, la calculadora de los transportistas que disponen de flotas con esta clase de vehículos pesados da cuenta de un ahorro aproximado de 600 euros mensuales. Fernando García introduce en su reflexión en voz alta otra variable que debería ser tenida en cuenta a la hora de establecer el marco de la ayuda estatal al combustible, si al final se prolonga más allá del 31 de diciembre. Es el fenómeno de la llamada 'España vaciada'. En una provincia como Segovia, con una demografía dispersa y que sufre la despoblación del medio rural, «o se tiene coche o no puedes hacer casi nada».

Por su parte, los taxistas se unen a la petición de claridad y prontitud al Gobierno de la nación. En Segovia, la asociación que agrupa a las licencias de este servicio público admite desconocer si dentro de tres semanas podrán continuar acogiéndose a la ayuda de los 20 céntimos por litro de combustible cada vez que acuden a llenar el depósito.

Aunque cada vez hay más vehículos híbridos y eléctricos, la flota de taxis en la ciudad cree que debería alargarse la bonificación porque, «aunque han aumentado el trabajo y los beneficios, no lo han hecho en la misma proporción» que los gastos del repostaje, expone el presidente del colectivo, Alfredo Sastre.

El representante de este sector advierte además de que «nosotros no podemos ajustar las tarifas, son las mismas, y mientras tanto el combustible nos sale más caro». Por lo tanto, como ocurre con las autoescuelas, Alfredo Sastre asegura que trabajan con márgenes muy ajustados y a veces incluso a pérdidas si falla el volumen de carreras.