Los héroes del histórico Real Valladolid del 84 pasan lista: ¡Cómo hemos cambiado!

Veinte años no es nada, pero cuarenta... ¡ay cuarenta! Son algo más que cuatro décadas. Si no, retroceda en el tiempo y piense dónde estaba, qué hacía y cómo vestía un 30 de junio de 1984. Los que empezábamos a disfrutar del fútbol en su esencia en Valladolid, privilegiados sin duda, ocupábamos cemento en la grada mientras el primer club de la ciudad se disponía a levantar el primer y único título oficial de su historia.

Ahí abajo sobre el césped, los jugadores -convertidos en héroes horas después- almacenaban recuerdos en el disco duro que hoy, cuatro décadas y casi dos meses después, han salido a flote en el transcurso del encuentro organizado por el Real Valladolid en el hotel Recoletos. Un cóctel privado al que han acudido 63 invitados, entre protagonistas de aquel logro y acompañantes, con ausencias destacadas como las del Polilla Da Silva, García Navajas, Fenoy (representado por su hija), Cendoya o Paco Fortes.

El resto, con la salvedad de los malogrados Manolo Peña o Gonzalo Alonso (representado en la figura de su hijo), han podido disfrutar de unos deliciosos momentos en los que han aflorado todo tipo de recuerdos y anécdotas regados por el paso del tiempo. En unos corros se podía ver en animada charla a Eusebio, Goyo Fonseca, el Pato Yáñez, Richard,... en otros a Luis Minguela, Pedro Pérez Duque, Gail, Martín Sáez,... Pepín y Pepe Moré por otro,... Aramayo, el entonces secretario técnico Ramón Martínez, el míster Fernando Redondo, el doctor Noriega,...

- Pero, ¿y aquel del pelo blanco? ¿quién es?, pregunta uno.

- Pues Eutiquio, ¡quién va a ser!, responden cerca.

Una vez completada la rueda de reconocimiento, los momentos compartidos han hecho el resto.

Todos ellos, anclados para siempre a la historia blanquivioleta a través de la icónica imagen de Pepe Moré elevando la Copa de la Liga al cielo de Valladolid, volverán a saltar en la tarde de este lunes al césped del estadio Zorrilla para recibir el reconocimiento del club y el aplauso de un público que no olvida a los héroes del 84. Los protagonistas serán recibidos por la mañana en el ayuntamiento y disfrutarán después de una comida de confraternidad antes de acudir al estadio.

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