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El Juzgado de lo Penal de Palencia celebra este martes la vista preliminar contra un hombre, V. D. O., para quien la acusación particular solicita una pena de tres años de prisión y 4.000 euros de indemnización por un presunto delito de abusos sexuales a una mujer ... . El Ministerio Público, por su parte, ha pedido el archivo provisional de la causa al considerar que «no resultan acreditados los tocamientos denunciados por la mujer sin que mediara consentimiento».
Los hechos se remontan a las 12:30 horas del 24 de mayo de 2021 cuando, según el escrito de la acusación particular, la denunciante salía de un supermercado y el acusado, de un bar en la localidad de Venta de Baños. «V. D. O. se dirigió hacia ella ofreciéndole patatas, a lo que la mujer le dijo que sí las quería, pero que se encontraba sin vehículo para poder llevárselas y que no tenía dinero, que debía ir a una oficina bancaria ya que no había pagado la compra del supermercado. V. D. O. le preguntó cuánto se iba a demorar en realizar todo ello y la mujer le dijo que unos cinco minutos, pensando ella que el hombre no estaría cuando volviese», relata la acusación particular en su escrito.
«Tras salir del supermercado y abonar el importe de la compra, la mujer se encontró a V. D. O., que se encontraba en una camioneta cerca del establecimiento comercial donde la mujer había efectuado la compra. El hombre ofreció un saco de patatas a la mujer y ella le pidió cinco kilos, a lo cual él le contestó que solo tenía sacos de 25 y que él la llevaría en coche y que no se preocupase por el dinero, que ya le daría lo que ella quisiese. La mujer accedió al verle una persona mayor», prosigue relatando la acusación particular.
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«En el interior del vehículo, el hombre le empezó a decir que era soltero y ella le dijo que ella estaba casada y le comentó irónicamente que le buscaría novia. V. D. O. le comentó entonces que la había visto pasar y que era una mujer que le gustaba, que le regalaba las patatas y le daba 20 euros, a lo que la mujer le dijo que estaba equivocando las cosas. El hombre le dijo que no le importaba que estuviese casada y le tocó la pierna hacia arriba. La mujer le dijo que se estaba confundiendo y le quitó el brazo de la pierna», agrega.
«El hombre le dijo que tenía ganas de ella, que le daba el saco de patatas y 20 o 50 euros y que tenía preservativos, y en ese momento le tocó un pecho, aunque solo llegó a rozarlo ya que ella le quitó el brazo. Ante esta situación, la mujer, aprovechando la escasa velocidad del vehículo, se bajó del resbalándose y, aún así, él le pidió el teléfono con un papel», concluye.
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