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Nuria Estalayo
Martes, 12 de mayo 2020, 07:19
Habla por lo que ha sufrido en su propia piel y como presidenta de la Asociación Comercio e Industria Cervera y Comarca. María Ángeles Carneros recuerda cómo el 16 de marzo hubo que cerrar todos los negocios, a excepción de los de alimentación o veterinarios. Los colegios se cerraron, las fiestas se suspendieron.. la vida se paralizó como consecuencia de la covid-19 «y partir de ahí, prácticamente todos en sus casas para ayudar a reducir el número de infectados en España», señala.
Sobre la desescalada, afirma que está esperando la respuesta que le den al alcalde de Cervera, Jorge Ibáñez, pues ha solicitado a la Delegación del Gobierno pasar a la fase 1 dada la baja incidencia del coronavirus en la zona básica de salud. «Es necesario abrir con todas las precauciones, pero simplemente, cada día que pasa es un factor perjudicial para todos, ya que las ayudas son mínimas. Por ejemplo, en uno de los bancos hemos pedido un ICO para 16 y solo han concedido para 2, Si los países no producen, la economía se agota, y hay que ser realistas y optimistas. Aún así sé que las personas nos reinventamos», señala.
Situación en la zona norte de la Provincia de Palencia
También se acuerda de los fallecidos y de los familiares que no han podido despedirles en el estado de alarma. «En Cervera no había ni mascarillas ni geles y apenas guantes», lamenta también a pesar de la satisfacción que supone que la zona presente una baja incidencia.
«El mes de marzo, hemos tenido que pagar la Seguridad Social. Este mes es otra historia, no sabemos que van hacer si cobrarán o no. Algunos socios han pedido cese de negocio, Ertes, incluso ICOS. Hemos bajado prácticamente casi todos el 100% de lo que se trabajaba, aunque se mantenga algún que otro negocio. Y paralos negocios que tienen locales pedimos que no se les cobre el alquiler del local en la medida que sea posible», señala.
Sus reivindicaciones están apoyadas por Diego Sardina, el presidente de HOSAC (Restaurantes y bares), también socio de ACIC. «Estamos recibiendo algunas ayudas, para las suspensiones de pagos de luz, gas y otros, como el teléfono, contratos de televisión. A algunos les han devuelto el 100%, a otros el 70%. Aunque no sé si es a todos ni si se mantendrán los descuentos hasta que se pueda volver arrancar. Nuestra preocupación es cuándo podrá ser la reapertura, porque cuanto más tardemos, más nos costará», dice Diego Sardina.
Es ahí donde están a la espera de las decisiones del Gobierno. «Cuando el alcalde reciba alguna notificación, hablaremos los presidentes de cada asociación en videoconferencia con él para ver cómo podemos hacerlo lo mejor posible. Desde el ayuntamiento nos ofrecen su colaboración, solicitando ayudas, y trabajando con nosotros codo con codo. Aunque hoy por hoy no sabemos qué pasará», apunta.
«Pero sí sé que tenemos que ser positivos si deseamos que la recuperación sea lo antes posible en beneficio de Cervera de Pisuerga y comarca», concluye.
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