El dueño frustra un robo de la 'banda del BMW' en el bar La Cueva de Alar del Rey, en Palencia

La renacida 'banda del BMW' intentó en la madrugada de ayer, sobre las 3:00 horas, robar en el bar La Cueva de Alar del Rey, si bien los golpes con sus mazas a la puerta de acceso al local y después a la máquina tragaperras alertaron al propietario del establecimiento, que vive justo encima y que bajó para impedir el robo, lo que puso en fuga a los delincuentes.

Según comentaban ayer desde el bar La Cueva, en Alar del Rey, eran cinco los integrantes de la 'banda del BMW' que trataron de robar en el establecimiento hostelero, uno que permaneció en el vehículo, un Seat León «de color negro» robado presumiblemente en Valladolid, y otros cuatro que bajaron con mazas y destrozaron la puerta de acceso al interior. Ya dentro, los delincuentes reventaron la máquina tragaperras (la caja registradora estaba abierta y solo con el dinero de cambio), pero los ruidos alertaron al propietario del bar y su familia, que viven arriba del local y que vieron desde las ventanas huir a los asaltantes. «Íbamos a bajar ya con las escopetas, porque mi hijo es cazador», comentaban desde este establecimiento hostelero de Alar.

Ese Seat León «de color negro» en el que vieron huir a los integrantes de la 'banda del BMW' posiblemente sea uno de los dos sustraídos en la madrugada del viernes en Cigales y La Cistérniga, localidades ambas de Valladolid. La renacida 'banda del BMW' cometió en esa noche cuatro robos en municipios de Valladolid. Primero sustrajeron los dos coches en La Cistérniga y Cigales y luego se desplazaron con ellos, según todos los indicios, para asaltar dos bares en Arroyo y Santovenia. En dichos locales, siempre sin salirse del guion habitual, reventaron a mazazos las lunas y las tragaperras para reunir un botín que solo en el primer local superó los tres mil euros. Luego se esfumaron. Un suma y sigue que está trayendo de cabeza a la Policía Nacional y la Guardia Civil, en cuyas oficinas de denuncias se acumulan cerca de «medio centenar» de casos de coches robados y presumiblemente más asaltos a bares, supermercados, tiendas y gasolineras diseminadas por Valladolid y Palencia.

Los asaltos se gestaron en Cigales La Cistérniga, donde los ladrones robaron dos vehículos de su modelo favorito para desplazarse y cometer sus posteriores asaltos, como es el Seat León, un coche que roban en segundos y que abandonan luego quemados o sumergidos en algún canal o río.

Los delincuentes, que al parecer se dividen en dos grupos –fuentes de la investigación apuntan que la banda opera en pequeñas células integradas por diferentes personas para dificultar su identificación–, visitaron luego dos bares de Arroyo y Santovenia, municipios ambos de Valladolid. En el primero, los cuatro delincuentes se apearon de un Seat León negro para dirigirse al ventanal y reventarlo a mazazos. Ya dentro, fueron a por las dos tragaperras, que destrozaron a golpes.

Eso ocurrió pasadas las 4:00 horas y los delincuentes de la 'banda del BMW' tuvieron que darse prisa en dar el golpe al percatarse de la llegada de un vecino en su coche que se disponía a aparcar en las inmediaciones. Así que cogieron el botín y huyeron de nuevo a bordo del Seat León, según apuntaron testigos del robo.

La escena, con pocas variaciones, se repitió esa misma madrugada en otro bar de Santovenia de Pisuerga, donde también tiraron de maza para reventar las tragaperras. Tanto esta localidad como la anterior fueron visitadas hace un par de semanas por los delincuentes (utilizaron BMW para sus asaltos) para intentar desvalijar un supermercado, en el caso de Santovenia, y para asaltar una tienda de informática de La Flecha y un Telepizza recién inaugurado.

Los dos Seat León sustraídos esa madrugada en La Cistérniga y Cigales no han podido ser localizados aún, si bien la Guardia Civil cree que el robado en Cigales fue el empleado en la madrugada de ayer en Alar del Rey.