Un guardia civil revisa el justificante de un conductor, a la entrada a Palencia. Marta Moras

Los palentinos, cívicos en la primera jornada de confinamiento

Los agentes realizaron en los controles una labor «didáctica» y de inspección, que en los próximos días puede traducirse en sanciones

Jueves, 8 de octubre 2020, 07:02

«En general, la gente se está portando muy bien. Todo el mundo está informado y la mayoría vienen ya con los justificantes de las empresas. Algún despistado hay, pero muy pocos», explicaba ayer uno de los oficiales de la Policía Nacional que participaba en ... uno de los controles de carretera en los accesos a la ciudad de Palencia, establecidos con motivo de la entrada en vigor de las medidas de restricción de la movilidad para frenar la propagación de la covid-19.

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Desde primeras horas de la madrugada, efectivos de las policías Nacional y Local, así como patrullas de la Guardia Civil controlaban los accesos a la capital palentina para evitar la entrada o salida de la ciudad de personas que no contaran con una justificación.

La orden de la Consejería de Sanidad, acordada con el Ministerio, por la que se establecen las restricciones a la libre circulación de los ciudadanos fija también una serie de excepciones que los agentes se encargaban de comprobar, vehículo por vehículo, en cada uno de los controles establecidos en las diferentes carreteras de acceso a la ciudad.

«Hemos ido caso por caso, porque las circunstancias pueden ser muy diferentes. Hemos parado cientos de coches para informar a los ciudadanos y explicarles cuál es la situación, y la verdad es que el comportamiento ha sido extraordinario. La mayoría de la gente estaba informada y al final solo hemos tenido que impedir el paso a cinco o seis conductores que no cumplían con ninguna de las justificaciones que figuran en la orden», explicaba el jefe de la Policía Local, el inspector Juan Manuel González Becerra, quien añadía que esos mínimos problemas se referían a personas que se acercaban a Palencia para hacer la compra desde municipios que disponen de sus propias superficies comerciales. «Hay que ver cada caso, y para eso está nuestra experiencia y nuestra profesionalidad. Quien viene a trabajar ya trae el justificante y hay otros que salen a fincas para atender el ganado. En esos casos, no hay duda. En otros, hay que comprobar la coherencia del relato que nos hacen los ciudadanos y estudiar el caso. No es lo mismo que vengan a comprar desde un pueblo pequeño, en el que no hay ni tiendas o quien viene de Villamuriel o Venta de Baños, que son pueblos grandes. Pues a esos es a los que se les pide que regresen, pero la casuística es muy grande, porque si el viaje es para comprar materiales, como las piezas de coche, que no son tan fáciles de encontrar, el caso es diferente», señalaba el jefe de la Policía Local, quien insistía además en que por el momento los agentes estaban únicamente informando, dado que se trata del primer día de entrada en vigor de las nuevas restricciones sanitarias.

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Así, de forma coordinada, con un reparto de espacios y de tiempos, las patrullas de la Guardia Civil, de la Policía Nacional y los agentes locales se fueron colocando a lo largo de toda la jornada en los accesos a la ciudad, comprobando los motivos que argumentaban todos los conductores que intentaban entrar o salir de la capital palentina y comprobando la autenticidad de los muchos justificantes que portaban ya en esta primera jornada la mayor parte de los ciudadanos.

«Las empresas se han puesto las pilas y todo el que va a trabajar lleva ya el justificante preparado. La verdad es que todo el mundo está bastante informado, con lo que no tenemos que perder demasiado tiempo en explicaciones y los controles están resultando ágiles y no se forman colas demasiado largas», explicaba uno de los policías nacionales.

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Los controles de acceso a la ciudad se mantendrán, en principio, durante los catorce días de aplicación de la orden de medidas restrictivas, aunque el jefe de la Policía Local recuerda que las propias autoridades sanitarias, con apoyo del Ayuntamiento de Palencia, han acordado revisar los efectos de la medida con el fin de comprobar si se ha producido un descenso en los contagios suficiente como para suspender la aplicación de las nuevas restricciones sanitarias.

Estas medidas extraordinarias, que también se han establecido en la ciudad de León y en el municipio de San Andrés de Rabanedo, tienen como principal objetivo frenar la propagación de la covid, que se ha visto disparada en las últimas semanas, tanto como para haber superado los tres criterios de alerta establecidos por el Ministerio de Sanidad: una incidencia acumulada en catorce días superior a 500 casos por cada 100.000 habitantes; superar el 10% de PCR positivas y tener ocupado más de un 35% de las camas de las unidades de cuidados intensivos.

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Desde las administraciones advierten de que por el momento, los agentes solo informan, pero que en los próximos días comenzará a imponer sanciones de tramitación rápida, con el fin de que tengan un efecto disuasorio.

Por su parte, el alcalde de Palencia, Mario Simón, quiso ayer destacar la «normalidad» y la «ausencia de incidentes» con los que se vivieron la jornada de ayer. El regidor insistió en que los agentes realizaron fundamentalmente una labor «didáctica» y de inspección, que se vio completada por una cívica actitud de la mayor parte de los ciudadanos. «La verdad es que en la vida general de la ciudad apenas hemos notado cambios, porque ya venimos de catorce días de medidas restrictivas, que han permitido bajar la incidencia de la enfermedad en un 22%, pero no es suficiente y debemos continuar. Ahora es muy importante que tengamos en cuenta las restricciones en las interacciones sociales, para que se reduzcan los grupos de personas en los encuentros sociales y familiares, que son en donde se detectan el 70% de los brotes. Esto es lo más importante», manifestó el regidor palentino.

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