Las familias pagan

Un asuntillo menor, por cierto. Ná, detallicos. Que conviene que tenga usted unos ahorrillos para cuando los churumbeles alcancen una cierta edad. Porque verá, si llegado el caso quiere usted viajar con ellos en tren, por aquello de la sostenibilidad y el cuidado del planeta y que conducir está demodé, resulta que sus herederos van a pagar como adultos con sueldo e hipoteca. Para Renfe, los niños solo son niños hasta los 13 años. A partir del bigotillo o de la primera regla, hombretones y mujeronas. A rascarse las propinas. En muchos hoteles van más lejos. A los 11, adultos con derecho a pago. Lo mismo en sitios turísticos como La Alhambra, por ejemplo. Así que un viaje familiar se convierte en un multiplicador de gastos.

¿Descuentos por familia numerosa? Pues solo si tienes tres hijos. Si eres madre/padre único y con dos criaturas, nada. Si eres una pareja con salario mínimo y dos hijos, tampoco. Como si no fuera más difícil mantener a dos niños siendo progenitor único con 2.000 euros al mes que con tres hijos y 8.500. Lo dicho, a ahorrar. Que los niños son una bendición, pero también un gasto.