Las ensaladas reinan en verano

Presentes durante todo el año, las ensaladas reinan en el verano. El origen de esta palabra proviene del latín 'herba salata', aunque los primeros indicios de su consumo se remontan al año 600 a. C. en Persia. Desde entonces hasta ahora, no solo se han mantenido las propuestas originales de aliñar con un poco de aceite y sal, sino que han evolucionado incorporando una amplia variedad de ingredientes y arriesgando con originales presentaciones. Así que si de creatividad se trata, las aparentemente aburridas hojas verdes de las lechugas ofrecen mucho juego si se saben explotar algunos recursos. Por supuesto, la vajilla es otro elemento a su favor.

Eso sí, las ensaladas ni se preparan ni se aliñan de la misma forma en todo el mundo. En los países asiáticos es frecuente encontrarse con algas o fideos de arroz, regadas con una salsa agridulce. Aunque no hay que irse muy lejos para descubrir que el aceite y el vinagre no son los ingredientes más recurridos como aderezo. En Reino Unido es frecuente encontrarse con una elaboración parecida a la mahonesa elaborada con vinagre y que también lleva algo de mostaza. Y la popular ensalada americana o coleslaw, mezcla col blanca picada finita con zanahoria igualmente cortada cubierta con una generosa capa de mahonesa aunque también se recurre a la mostaza o varios tipos de vinagreta.

Todo el mundo es bienvenido en el mundo de las ensaladas: huevo, semillas, quesos, encurtidos, cereales, marisco, carnes y pescados, frutas de todo tipo, hortalizas y verduras, pasta y arroz son algunas de las mezclas que más se preparan cuando llega el buen tiempo. Y no nos olvidamos de los embutidos que, por ejemplo, no faltan en el plato bautizado como Limón Serrano y que está catalogado como ensalada aunque sea el desayuno típico de los jueves santos en Salamanca.

En la provincia leonesa se inclinan más por los pimientos asados de El Bierzo, con ventresca y anchoas de forma que cada zona interpreta este plato en función de los productos de la zona.

Hay mucho donde elegir para innovar con composiciones personales en función de los gustos y de la función que vaya a tener durante la comida, como plato principal o acompañamiento. Escarola, batavia, lollo rosso, hoja de roble, cogollos, iceberg, romana o trocadero son solo una pequeña muestra de las muchas posibilidades entre las que poder escoger. Un grupo al que se suman rúcula, canónigos, berros, endivias y espinacas, entre otros.

Las ensaladas, para muchos se han convertido en la mejor opción para no 'perder' mucho tiempo en la cocina, dejándolas con antelación preparadas y fresquitas en la nevera, para ser servidas al momento cuando uno llega de la piscina o de pasar una jornada de ocio.