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Fueron a estudiar a Amsterdam y allí siguen cuatro años después porque «hay muchas oportunidades para grupos jóvenes». Así habla Ovidi Martí, saxofón del Diante Reed Quintet que inaugura este sábado la temporada de Juventudes Musicales en el Teatro Calderón.
Es el único quinteto de ... cañas en activo tras el primero que se formó hace cuarenta años en Países Bajos. «Quizá la rareza, lo exótico, nos hace más llamativos. El quinteto de viento (clarinete, oboe, flauta, fagot, trompa), es más común que el de cañas (clarinete, oboe, fagot, clarinete bajo y el saxofón)», explica Ovidi. La falta de repertorio propio les lleva a «tocar lo que queramos, con arreglos claro, para eso contamos con profesionales holandeses. Ytambién trabajamos en nuevas obras que nos escriben. Es la ventaja de no estar atado a lo clásico».
Eligieron el nombre de Diante, clavel en esperanto, porque «nos sentimos mediterráneos y españoles, aunque hemos tenido que buscar fuera porque en España, por desgracia, se paga mal y tarde a los músicos jóvenes. Nos gusta mucho tocar allí, pero las condiciones son para pensárselo».
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Victoria M. Niño
Este sábado traen su programa 'Identidades: La magia del duende' y con ese hilo conductor interpretan la 'Suite española', de Albéniz; 'Doce danzas españolas', de Granados; 'El canto dels Ocells'; 'Doña Francisquita', de Amadeo Vives; 'Jesu dulcis memoria', de Tomás Luis de Victoria, 'La vida breve' y 'El amor brujo', de Falla; 'Negra sombra', de Xoán Montes y una composición contemporánea de Primo Ish-Hurwitz para ellos, 'Tres preludios al amor brujo'.
Desde el Renacimiento hasta hoy, el duende es perseguido por músicos y artistas sobre el escenario. Ovidi reconoce que «hay días que se encuentra más fácil que otros. Pero en los conciertos vemos que la gente se emociona, se el supone la carne de gallina, algunos lloran, y al final te dicen que no esperaban esas emociones con un quinteto tan joven. Con emocionar a uno solo ya vale la pena el esfuerzo». Sobre cual es el camino más corto para cruzarse con él, el saxofonista tiene claro que «hay obras que llamamos caramelitos, son las lentas, bajan las pulsaciones del público y las nuestras e invitan a reflexionar, a imaginar. Buscamos el contraste con las rápidas, esas que muestran el espíritu del español echado para adelante». El concierto será el sábado 16, a las 20:00h, en la sala Miguel Delibes del Teatro Calderón.
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