Castilla y León

PSOE y PP solapan dos propuestas de ley sobre violencia de género tras 7 años sin desarrollo

Esto se firmaba el 23 de junio de 2021. Un año más tarde, Vox entraba a formar parte del Gobierno de Castilla y León e introducía en su acuerdo con el PP la necesidad de aprobar una ley de violencia intrafamiliar. Pasados dos años y medio, ninguna de las dos ha visto avance alguno. La propuesta por Vox, de hecho, ha caído en el buzón de sugerencias desechadas después de romperse el pacto de Gobierno, junto al proyecto de ley de concordia que presentaron los portavoces de ambos grupos en una rueda de prensa conjunta, entonces Raúl de la Hoz (PP) y Carlos Menéndez (Vox).

El PSOE avanzó fechas atrás que presentaría en las Cortes una proposición de ley sobre violencia de género. Y Alfonso Fernández Mañueco anunció, el 25 de noviembre, que la Junta estaba terminando la tramitación de la nueva ley y que iba a remitirse al Consejo Consultivo para que llegue a las Cortes a principios de 2025.

Al final, el PSOE ha sido quien primero ha llevado el texto al parlamento autonómico. «El PP no ha tenido nunca voluntad [de desarrollar la normativa], no solo en estos dos últimos años en los que ha estado preso de la extrema derecha. El PP prefirió sacrificar la lucha contra la violencia de género por el poder. Ahora quieren volver al acuerdo, pero la realidad es que el daño ya está hecho. Haberles dado voz a los machistas, a la extrema derecha, ya ha tenido consecuencias», ha aseverado Luis Tudanca, secretario autonómico de los socialistas, en la presentación de su proposición.

Con los dos partidos mayoritarios de acuerdo en construir una nueva norma, debería producirse un resultado legislativo antes de que un nuevo proceso electoral se lleve por delante todas las iniciativas, con ese borrón y cuenta nueva que provocó, por ejemplo, el anticipo electoral de 2022. PP (31) y PSOE (28) suman 59 de los 81 procuradores de la Cámara, y solo Vox (13 escaños) es claramente contrario a una normativa así. Lo que queda, por tanto, es debate.

Y en ciertos aspectos ambos partidos parecen cercanos. Luis Tudanca resumió brevemente el articulado de su proposición de ley. Que quiere prestar atención, señaló, a «las nuevas formas de violencia». «Hemos visto con horror las nuevas formas de violencia, en especial la violencia contra las mujeres en lo que se refiere al intento de limitación de su libertad sexual y reproductiva; la esclavitud sexual; la violencia vicaria; nuevos fenómenos como la violencia ejercida en los entornos digitales», desgranó. La nota de prensa de la Junta, en noviembre, decía que el texto, su proyecto de ley, «recoge nuevas formas de ejercerla y sufrirla, como la violencia vicaria, dirigida a hijos, familiares o allegados; la digital, a través del uso de las tecnologías; o la violencia de segundo orden, ejercida contra las personas que apoyan a las víctimas». Un párrafo que coincide en parte, de nuevo, con otro de los artículos expuestos por el PSOE: «Con los hijos huérfanos por violencia de género, exponente dramático de esta violencia machista, queremos la calificación de todos los hijos como huérfanos absolutos hasta los 26 años para que puedan acceder a todas las ayudas disponibles por parte de la Junta y del Estado».

El PP propone, decía su nota, «centros Atiendo que se abrirán en el resto de capitales de provincia de la comunidad», espacios «accesibles, seguros, cercanos, ubicados en el centro o el semicentro de las capitales de provincia». Y el PSOE quiere que estos centros de atención a las víctimas sean comarcales, «para que todas las mujeres puedan tener una atención rápida, urgente».

Y volvía el Ejecutivo autonómico: «La Junta de Castilla y León desarrollará hasta finales de 2024 una potente campaña en la prensa autonómica y nacional, medios digitales, radio y televisión. Los objetivos de esta acción comunicativa son difundir la marca 'Atiendo', informar ampliamente sobre todos los recursos disponibles para las víctimas y sensibilizar a la sociedad, especialmente a los más jóvenes». Y el PSOE: «Nuevas medidas para la sensibilización y visibilización de esta causa, campañas informativas».

Y de nuevo los socialistas: «Impulsar programas específicos para todos los profesionales en todos los ámbitos, laboral, judicial, educativo, sanitario… Que se incluyan en los temarios para oposiciones». Y el PP: «[Incidir en la] Formación de los profesionales de distintos sectores en materia tanto de prevención como de atención, que se ha incrementado de manera exponencial durante 2024. Si el pasado año se cerró con más de 4.000 profesionales formados, este año ya se ha alcanzado la cifra de 6.727».

Propuestas que se entrecruzan y que desembocarán en las Cortes en un debate parlamentario en el que los dos principales partidos comparten posiciones con más o menos matices.