

Secciones
Servicios
Destacamos
Luis Tudanca (PSOE) y Juan García-Gallardo (Vox) tenían la misma duda. ¿Cómo va a actuar el nuevo Gobierno minoritario de Alfonso Fernández Mañueco? Incluso ... pusieron los mismos ejemplos, aunque desde ópticas distintas. El socialista le recordó que «sigue colgado» en la web de la Consejería de Sanidad «el protocolo antiaborto» nonato presentado por el ahora ex vicepresidente en una rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno. Y el de Vox insistió, dos veces, en que efectivamente ese protocolo «sigue publicado» en la web, y que solo falta que el Gobierno, ahora el PP, se anime a ponerlo en marcha. »¿Qué le ha llevado a no cumplir ese acuerdo?».
Y Tudanca: «¿Va a retirar o no la ley de concordia que firmaron juntitos y echar atrás la declaración como Bien de Interés Cultural de la Pirámide de los italianos, ese monumento franquista?».
Y Gallardo: «¿Qué va a hacer con la ley de concordia? Si usted está de acuerdo con un texto que registramos después de mucha negociación, de mucho reposo, de mucho diálogo, en abril de este año, ¿va a votar a favor o no? ¿Qué parte le desagrada, qué parte no considera bien?».
Y Tudanca: «Ustedes siguen invisibilizando la lucha contra la violencia de género».
Y Gallardo: «¿Va a recuperar las políticas de la agenda 2030, en particular las dedicadas a promover el efecto llamada y las políticas climáticas y LGTB?».
Y Tudanca: «A ver si ustedes están con los racistas o con quienes creemos que la inmigración de verdad es una oportunidad para Castilla y León: está pendiente de acoger a los 200 niños que huyendo de la guerra en sus países a los que se comprometió en 2022».
Y aún quedaban por intervenir el soriano Ángel Ceña, que quería saber si lo de negociar los presupuestos iba en serio y no como ocurrió meses atrás, cuando el PP y Vox tumbaron más de 2.000 enmiendas de todos los grupos parlamentarios de la oposición. Y Pablo Fernández, a vueltas con la Pirámide de los italianos.
De pronto Alfonso Fernández Mañueco era Emilio de Justo y el hemiciclo era un coso. En lugar de seis 'victorinos', siete grupos en la oposición contra un PP, por primera vez en cuatro décadas, en minoría absoluta, cojo de un socio. PSOE, Vox, UPL, Soria ¡Ya!, Por Ávila, Podemos y Francisco Igea. Aquí otro hito histórico. En el próximo turno del ex de Ciudadanos, Mañueco recibirá las preguntas de dos ex vicepresidentes.
El paseíllo lo hizo el presidente de la Junta por la puerta trasera de la Cámara, esa que se acostumbró a coger cuando los albores de la era PP-Vox levantaban expectación de los medios nacionales y aparecían por el parlamento micrófonos de El Intermedio y otros poco habituales en busca de un canutazo. Recobrada la tranquilidad -al menos mediáticamente-, se mantiene el itinerario alternativo. Lo advierte Google Maps: demasiada prensa en el pasillo.
Mañueco calibró las preguntas y respondió como se esperaba, con un argumentario que va a martillear una y otra vez cada vez que tenga ocasión.
A Tudanca: «Está usted plegado a los dictados de Ferraz. Quien manda en ese grupo parlamentario no es usted, es Madrid».
A Gallardo: «Si algo ha quedado meridianamente claro este verano ha sido que quien manda en su formación en Castilla y León no está en Castilla y León, está en Madrid».
El presidente de la Junta, a estas alturas, no tiene que atacar, solo defender el resultado. Con unos presupuestos prorrogables, porque eran los más altos de la historia, un equipo de perfil más discreto que tratará de demostrar eficacia en la gestión y un escenario nacional que le beneficia. «Seguiremos luchando por la igualdad de todos los españoles y por la solidaridad entre todos los territorios», colocó como epílogo. Es decir: Cataluña, concierto económico, cupo, singularidad, financiación privilegiada…
Noticias relacionadas
Así que Mañueco, en ese afán de contemporizar, va a mantener un discurso simple y sin riesgos. En algunos casos, aunque sea a costa de remedar el discurso grouchomarxista de «la parte contratante de la primera parte». Como cuando García-Gallardo quiso saber qué principios van a regir la actuación del Gobierno del PP en minoría. Pues los principios del PP. ¿De qué PP, quiso saber Gallardo, el de Rajoy, el de Feijóo, el de Aguirre? «Los principios del PP son claros y evidentes». ¿Y cuáles son? «Defendemos los mismos principios con los que nos presentamos a las elecciones autonómicas, que tuvieron la mayoría de los votos». Y así en bucle hasta que la oposición se aburra o lleguen las elecciones, lo que antes suceda.
Porque en este primer Pleno del curso político la pregunta de los corrillos era «¿hasta cuándo llegará esta legislatura?». Cotiza muy poco, casi nada, que si Pedro Sánchez convoca elecciones generales anticipadas, Castilla y León pondrá las urnas autonómicas a la vez. Se paga mucho mejor que la legislatura llegue a término, allá por febrero de 2026, por más que Alfonso Fernández Mañueco insista públicamente en que ese es su deseo. Y entre las opciones más destacadas aparece mayo-junio de 2025 como una fecha probable para lo que sería un adelanto técnico a lo Moreno Bonilla en Andalucía.
Mientras eso llega, Mañueco basará su travesía política en minoría y sin socios en el agravio catalán, las órdenes de Madrid a PSOE y Vox y la voluntad de negociación de los presupuestos como una muestra de apertura al diálogo. Y respecto a las cuestiones que tanto preocupaban a Tudanca y a Gallardo… Sí, señorías: el agravio catalán, las órdenes de Madrid a PSOE y Vox y la apertura al diálogo. Como en las letras de las canciones en los viejos vinilos, 'repeat chorus'.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.