El Ayuntamiento de Zamora condenado a pagar otros 600.000 euros por el fallido edificio municipal

El Ayuntamiento de Zamora ha sido condenado a pagar otros casi 600.000 euros a la empresa UFC por el contrato firmado en 2004 para construir un edificio municipal que finalmente no se ejecutó. En este caso, se trata de los gastos financieros derivados de la operación por la que UFC compró solares y locales, que ascienden a 596.460 euros y que ya establecía la condena que debería pagar el Consistorio. Sin embargo, el Ayuntamiento, a pesar de haber sido condenado, pedirá una aclaración del auto judicial puesto que considera que contiene errores en los cálculos de esos gastos financieros por parte de la empresa y que la cantidad que debería pagar tendría que ser «notablemente inferior».

Esta nueva condena al Consistorio zamorano demuestra, según el equipo de Gobierno, que la operación proyectada en su día por el Partido Popular le está saliendo cara a la institución. «El Ayuntamiento es condenado a pagar a UFC 596.460 euros por la nefasta operación ideada por el diputado en las Cortes y entonces alcalde, Antonio Vázquez», sostienen y recuerdan que la institución ya fue condenada y pagó 3,5 millones de euros, además de 287.000 euros que ha tenido que desembolsar en concepto de intereses por el retraso del pago principal.

Además, desde el equipo de Gobierno explican que los pagos a los abogados contratados por el Ayuntamiento, incluyendo condenas en costas, suponen casi otros 400.000 euros. «En definitiva, estamos hablando de que esa frustrada operación ha supuesto casi 5 millones de euros, cantidad con la que se podría haber construido un nuevo edificio promovido directamente por el Ayuntamiento», critica el actual equipo de Gobierno y destaca que en aquella operación votaron a favor «levantando la mano» el vicesecretario de Organización del PP y presidente provincial del partido, Fernando Martínez-Maíllo, y el concejal y viceportavoz del PP en el Ayuntamiento, José Luis González Prada. «Ambos deberán explicar», según el Gobierno municipal, si avalan las palabras de Antonio Vázquez de que «era una buena operación, diseñada con el aval de los técnicos» y que «ni fue un error ni un invento de cuatro personas».