Juan Millán coloca las cajetillas de tabaco en su estanco de la calle Alamillos. Rodrigo JIménez

La venta de cigarrillos se desploma en Valladolid y cae a mínimos históricos entre enero y octubre

La asociación de expendedores cree que la ley antitabaco de 2011, que prohibió fumar en el interior de bares, aceleró la caída

Eva Esteban

Valladolid

Lunes, 20 de diciembre 2021, 07:12

Compran los vallisoletanos menos tabaco que nunca. Así se desprende de las estadísticas sobre el mercado de tabacos del Ministerio de Hacienda y Función Pública, que desvela que las ventas se han desplomado a mínimos históricos durante los diez primeros meses de 2021, ... los últimos datos disponibles. Concretamente, entre enero y octubre en la provincia se despacharon un total de 18.952.938 cajetillas, es decir, 379 millones de cigarrillos –si se tiene en cuenta que en cada una hay veinte–. La mitad que en 2005, fecha de la que se disponen datos provincializados.

Publicidad

Entonces, los estancos expendieron más de 38 millones y medio de cajetillas. 773 millones de cigarrillos. «Se empezó a notar la caída incluso antes, sobre 2003, y desde entonces va cayendo un poco cada año», reconocen fuentes de la Asociación Provincial de Expendedores de Tabaco y Timbre del Estado de Valladolid, al tiempo que auguran un futuro «poco halagüeño» para el sector si la tendencia se mantiene. «Si sigue como hasta ahora y va a menos, el futuro no es bueno», añaden.

Fue 2008 el año en el que en Valladolid se dieron salida a más paquetes: 38.703.533. Desde entonces ha registrado un descenso imparable, a razón de más de tres millones de cajetillas al año.

«Desde 2003 va cayendo un poco cada año. Si sigue como hasta ahora, el futuro no es bueno», afirman fuentes del sector

Sin embargo, 2011 marcó un punto de inflexión. Fue el momento en el que se detectó la caída más drástica, que fuentes del sector en la provincia atribuyen a la ley antitabaco (a principios de ese año entró en vigor la reforma de la ley antitabaco de 2006), que fijó la prohibición de fumar en el interior de bares y restaurantes. «Viene de poco en poco cayendo todos los años. Si quitas lugares donde se puede consumir, evidentemente disminuye, y cuanto más restricciones se impongan, peor», añaden.

Aceleró el desplome del consumo, y podría «ir a más» si se imponen más limitaciones a raíz de la covid. «Ya no se puede fumar en terrazas y está claro que si te limitan los lugares y tiempos donde puedes fumar, el consumo es menor», consideras desde la Asociación Provincial de Expendedores de Tabaco y Timbre del Estado, que aglutina a los cerca de setenta estancos que están repartidos por la provincia.

Publicidad

Subida de precio

A que los vallisoletanos gasten menos en tabaco ha contribuido también –opinan en el sector– la imparable subida del precio de la cajetilla. De media, hoy cuesta el doble que hace quince años (en 2005 costaba unos 2,5 euros y, en la actualidad, entre 4,5 y 5). Precisamente este coste mayor ha permitido compensar la caída de ventas. Mientras que entre enero y octubre de 2005 los vallisoletanos gastaron casi 86,5 millones de euros en cigarrillos, durante los diez primeros meses de 2021 han destinado 86 millones.

En los estancos, a pie de calle, la sensación es similar: este año ha sido el que menos ventas han registrado «con diferencia». Juan Millán, que regenta estanquero de la calle Alamillos de la capital, reconoce que, en su caso, la salida de unidades «ha bajado a más de la mitad». «Fumadores puede haber más o menos, pero si los momentos para fumar han disminuido muchísimo, lógicamente hay menos tiempo para ello», apunta este autónomo, al tiempo que prevé «más hachazos» para el sector. «Hemos sufrido ya varios hachazos con las prohibiciones y la pandemia fue ya el remate final, aunque quedan más golpes», lamenta.

Publicidad

Para buscar una salida a esa adicción, cada vez son más los castellanos y leoneses que recurren a programas especializados de Sanidad o de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). De hecho, las gerencias de Atención Primaria de la comunidad atendieron durante 2020 a 19.166 pacientes, 4.287 de ellos en Valladolid. Asimismo, durante los seis primeros meses de este año, fueron 1.133 los vallisoletanos que recurrieron al sistema sanitario público para dejar de fumar. Cabe recordar, en este sentido, que los tratamientos farmacológicos para dejar de fumar son financiados por la sanidad pública desde el pasado 1 de enero de 2020. Durante el primer ejercicio desde su entrada en vigor, Sacyl recetó en la región 19.166 fármacos de Zyntabac y Champix, los únicos habilitados con tal fin, aunque la comercialización de este último se retiró en julio de 2021.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad