«Las empleadas de hogar cuidan cada vez más a dependientes, un trabajo de mayor responsabilidad»

«Son mujeres que acompañan a nuestros mayores como si fueran sus hijas, cuidan a nuestros hijos como una madre o una hermana. Mujeres que en su proceso migratorio afrontan como internas la soledad. El régimen interno no favorece la generación de red social, de vínculos para los necesarios respiros», señalan.

Todo esto implica que las empleadas de hogar tienen que disponer de conocimientos en el cuidado de personas y desempeñar funciones de mayor responsabilidad de lo que su contrato contempla.

En Cáritas han observado «desde siempre» que los empleadores tienen dificultades en el proceso de contratación, que por lo general desconocen cómo gestionar trámites con la Seguridad Social. «En este sentido, la página habilitada por la Seguridad Social, IMPORTASS, ha facilitado este proceso», ilustran.

Por otro lado, gracias a las reformas legislativas, a las campañas de sensibilización y a la labor concientizadora y mediadora de las entidades sociales, se han dado pasos significativos en la dignificación de un trabajo tan importante para la conciliación familiar (condiciones laborales y económicas más dignas, alta en seguridad social, cotización por desempleo, descansos, etc.)

Todavía, reconocen, hay familias que se resisten a dar de alta a estas trabajadoras. Desde Cáritas se informa sobre su importancia y la mayoría de ellas son conscientes de las ventajas, ya que actualmente cotizan por incapacidad temporal y desempleo. «También habría que añadir que la situación económica de las familias, cada vez más precaria, dificulta la contratación y esto también ha provocado el descenso de contratos», comentan.

El 30 de marzo se celebra el Día Internacional de las Trabajadoras de Hogar y Cáritas ofrecerá un taller de información abierto sobre condiciones laborales de 17 a 18:30 horas, en el Centro Cívico Bailarín Vicente Escudero.