Alrededor de una decena de detenidos en una macrorredada antidroga en Pajarillos

De forma simultánea, la Policía Nacional se ha personado en edificios del número 3 de la calle Villabáñez, a la altura del túnel de Vadillos, donde han completado varios registros con presencia policial a lo largo de la calle. Ardua tarea, antes de que se montara el mercadillo de los martes, al que se ha añadido los registros en la calle Marabu. También se han producido registros en la localidad de Cigales. Alrededor de una decena de personas han sido detenidas en el conjunto de esta operación policial en el día de hoy, informa Europa Press.

Ha sido en este punto el que se ha necesitado más presencia policial a tenor de la hilera de vehículos policiales aparcados en doble fila. Furgones, coches de incógnito, patrullas, guías caninos, agentes del Grupo Operativo de Intervenciones Técnicas (GOIT), personal de Aduanas y de la UIP han empezado la intervención por uno de los bajos.

Un registro pormenorizado en el que han participado varios agentes, mientras el resto escoltaba el inmueble de dos alturas. Con el paso del tiempo y tras introducir material para determinar la presencia de droga en las estancias, la Policía sacó al primer detenido de la madrugada (un hombre), para continuar con el arresto de una mujer, al parecer del bajo del edificio.

Asimismo, mientras las comprobaciones continuaban, los perros entraban en acción para concluir la primera parte de la inspección y antes de seguir con los pisos superiores. El movimiento en el interior era frenético, según se presenciaba por la rendija de una de las ventanas, pero lo era también en el exterior.

Mientras Aduanas completaba el registro, en el que se han incautado de distintas cantidades de heroína, hachís y cocaína, agentes de la Nacional sacaban una escalera de uno de los furgones para trepar hasta la copa de un árbol. Habían visto una riñonera que colgaba de una de las ramas y sospecharon que en un primer momento alguno de los sospechosos la había arrojado por la ventana. Finalmente, tras subir a lo alto, comprobaron que no había nada delictivo en su interior.

Así transcurrió la primera hora de la redada en la barriada del 29 de octubre. Tiempo en el que los dos primeros detenidos fueron trasladados hasta dependencias policiales, mientras los otros dos, otro hombre y una mujer de edad joven, esperaban en el interior del edificio a la llegada del vehículo policial para ser trasladados a comisaría.

La última actuación de los agentes, además de volver al piso con el guía canino, fue revisar uno de los vehículos, aparcado a escasos metros de la calle Marabú. Dos agentes de Aduanas salían del inmueble repitiéndose para sí mismos el número de la matrícula y dar con el coche, un Opel Astra.

Empezaron por el maletero para seguir por el habitáculo y concluir con el capó sin hallazgos, a simple vista, determinantes.

Tras bajar a los dos últimos arrestados, uno de ellos lo hizo con un cigarrillo en la boca, el despliegue policial se volatilizó.

Esta intervención policial se suma a la del pasado martes, cuando agentes de la Nacional se personaron en Barrio España y otros puntos para descabezar el clan Mena.