Tres clientes impiden un atraco a mano armada en el bar La Ferroviaria

Los hechos ocurrieron a las 2:05 horas del lunes, víspera de la festividad del Pilar, cuando solo quedaba José Luis detrás de la barra y tres clientes (amigos) que le acompañaban mientras recogía antes de cerrar el local. «Es el primer atraco que sufro en mi vida y solo puedo estar agradecido a mis clientes», reitera el veterano hostelero, que acumula más de cuarenta años en el sector, 33 de ellos al frente de un clásico de la hostelería de la capital, como es La Ferroviaria, un negocio que abrió sus puertas en 1903.

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José Luis reconoce que en «ningún momento» supieron si las pistolas eran o no reales. Pero «lo parecían». Uno de los encapuchados accedió al local instantes después de las dos de la mañana portando una pistola mientras su compinche, con otra arma de la mano, esperaba en la misma puerta. El atracador fue directo hacia los clientes, a los que encañonó en todo momento, y comenzó a gritar: «Contra la barra». La reacción de uno de los clientes, al que llegó a empujar sin dejar de apuntarle con la pistola, no le dio opción a más. El testigo repelió el empujó y sacó literalmente del bar a empujones al delincuente.

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La secuencia, recogida por la cámara de seguridad del local, muestra el fugaz intento de asalto, que tan solo duró diez segundos, gracias a la «sangre fría» de las víctimas. «Fue todo muy rápido, conseguimos sacarles a la calle y, después de discutir con los dos atracadores, acabaron huyendo», relata José Luis. El primero de los asaltantes fue el que lideraba a la pareja de delincuentes. Y su compinche, que le esperaba a la puerta, también pistola en mano, le pidió que se marcharan al ver la reacción de los clientes y del propio hostelero.

Los cuatro consiguieron evitar así el que sería el primer atraco a mano armada, al menos, conocido, en un bar más que centenario. «Siempre he dicho que lo mejor es La Ferroviaria son sus clientes», ha apuntado el propio hostelero en un mensaje abierto en las redes sociales, en el que recalca que «gracias a su valor se evitó un atraco a mano armada». José Luis agradece, además, «la rápida llegada de los policías locales y nacionales». Los agentes no pudieron localizar a los asaltantes y tratan de averiguar ahora la identidad de los autores del atraco frustrado.